Portada>Noticias |
spanish.china.org.cn | 15. 04. 2015 | Editor: Claudia Leng | [A A A] |
II. El nuevo Tíbet ha emprendido un camino de desarrollo correcto
Después de 1949, año de la fundación de la República Popular China, el Tíbet experimentó cambios de carácter histórico. En 1951, el Tíbet materializó la liberación pacífica, lo cual creó condiciones para expulsar totalmente del Tíbet las fuerzas imperialistas. En 1959, en Tíbet se realizó la reforma democrática, dando fin, de un golpe, a la esclavitud feudal teocrática, sistema vigente durante varios siglos. En 1965, se fundó la región autónoma del Tíbet, estableciéndose el sistema socialista. Después de 1978, China empezó la reforma y apertura, la modernización en el Tíbet logró éxitos nuevos de forma constante. Con la entrada en el siglo XXI, el desarrollo tibetano entró en una vía rápida y la construcción integral de una sociedad modestamente acomodada obtuvo nuevos avances. Gracias a los más de 60 años de construcción y desarrollo, el pueblo de las diversas etnias del Tíbet ha encontrado, mediante investigaciones graduales, un camino de desarrollo poseedor de peculiaridades chinas y características del Tíbet, presentándose ante el mundo un nuevo Tíbet en el cual resplandecen lo tradi-cional y lo contemporáneo.
–El camino de desarrollo del nuevo Tíbet es un camino de la gran unidad de la nación china
En la época moderna, debido a la invasión imperialista, el Tíbet se enfrentaba a dos destinos: uno, la unificación con la gran familia de la nación china y el otro, la separación de la gran familia de la nación china. Los colonialistas ingleses agredieron con fuerzas armadas el Tíbet en dos ocasiones, una en 1888 y la otra en 1904, forzando al entonces gobierno de la dinastía Qing (1644-1911) a firmar tratados desiguales que les concedían una gran cantidad de privilegios en el Tíbet. Tras la caída de la dinastía Qing, los colonialistas ingleses fueron activos en cultivar fuerzas secesionistas tibetanas, creando el problema de la “independencia del Tíbet”. Después de la fundación de la República Popular China en 1949, los elementos secesionistas de la capa superior del Tíbet y las fuerzas imperialistas aceleraron el plan de la “independencia del Tíbet” intentando separar al Tíbet de China. El Gobierno Popular Central, basándose en la historia y la situación práctica del Tíbet, decidió adoptar la política de liberar al Tíbet por vía pacífica, salvaguardar con firmeza la unificación y la integridad territorial estatales. El Panchen X y otras personalidades patrióticas de los diversos sectores sociales también dieron a conocer diferentes llamamientos de liberación del Tíbet pidiendo al Ejército Popular de Liberación de China acantonar tropas en el Tíbet con el fin de salvaguardar la unificación estatal. El 23 de mayo de 1951, los representantes del Gobierno Popular Central y el gobierno local tibetano firmaron el Acuerdo sobre los Medios de la Liberación Pacífica del Tíbet (en adelante: Acuerdo de 17 Puntos), declarando que el Tíbet fue liberado pacíficamente. El 24 de octubre del mismo año, el Dalai XIV envió un mensaje al Presidente Mao Zedong del Gobierno Popular Central en el cual manifestó: “El gobierno local del Tíbet y el pueblo tibetano, tanto los monjes como los laicos, brindan el apoyo unánime y bajo la dirección del Presi-dente Mao y el Gobierno Popular Central, asistirá activamente a las unidades del Ejército Popular de Liberación que entren en el Tíbet para consolidar la defensa nacional, expulsar del Tíbet a las fuerzas imperialistas y salvaguardar la unificación del territorio y la soberanía de la patria.”
La liberación pacífica del Tíbet libró al Tíbet del yugo de las fuerzas agresoras imperialistas, puso fin a los intentos del imperialismo de fabricar una “independencia del Tíbet” e hizo realidad la gran unidad de la nación china bajo las nuevas condiciones históricas. La liberación pacífica posibilitó la solución de los problemas dejados por la historia entre el Dalai y el Panchen, contribuyendo a la consumación de la gran unidad del seno del Tíbet. Después de liberar pacíficamente al Tíbet, el Gobierno chino anuló progresivamente los privilegios de que gozaban otros países en el Tíbet durante largo tiempo. En 1954, China y la India firmaron el Acuerdo sobre el Comercio y el Transporte entre la Región Tibetana de China y la India, erradicando los privilegios heredados por la India en el Tíbet que dejó la agresión inglesa. En 1956, China y Nepal firmaron el Acuerdo entre la República Popular China y el Reino de Nepal sobre el Mantenimiento de las Relaciones Amistosas y sobre el Comercio y el Transporte entre la Región Tibetana de China y Nepal, resolviendo los problemas dejados por la historia entre la región tibetana china y Nepal.
En un período superior a medio siglo subsiguiente al suceso, en la gran familia de la nación china, el pueblo de las diversas etnias del Tíbet y el pueblo de todas las etnias del país entero, con una voluntad común, en un mismo barco zarandeado por la tempestad, establecieron relaciones étnicas de igualdad, unidad, ayuda mutua y armoniosa. La etnia tibetana y las demás etnias son inseparables entre sí, ninguna puede estar sin otra. En la lucha por salvaguardar la unificación estatal y oponerse a la secesión étnica, el pueblo de todas las etnias del Tíbet, unido alrededor del Gobierno Central, ha experimentado pruebas de diversas dificultades y riesgos, defendiendo la cohesión de la nación china y la unificación estatal. En el curso de la materialización de la gran revitalización de la nación china, el pueblo de las etnias del Tíbet comparte con el pueblo de todas las demás etnias del país entero los frutos y la gloria del desarrollo estatal.