1. El pueblo escondido de Guoliang (Henan)

Hace años, los habitantes de este pueblo sólo podían bajar de la montaña en la que se sitúa la localidad a través de un peligroso camino. Excavaron un túnel a través de la montaña y la llamaron la Cueva de Guoliang, compuesta de esquisto rojo. En la actualidad, el pueblo de Guoliang resulta atractivo por sus paisajes únicos y sus edificios de piedra.