3. Mantenimiento de la buena tendencia del desarrollo agrícola y rural
Se ha aumentado en general el rendimiento de los productos agrícolas principales. Los cereales estivales, el arroz tempranero y los cereales otoñales registraron cosechas abundantes en sus temporadas, aumentando respectivamente en un 2,5%, 4,5% y 5,1% sobre el año anterior; y la producción cerealera a lo largo del año se situó en 571,21 millones de toneladas, para un aumento del 4,5%, realizándose un crecimiento por octavo año consecutivo, e implantándose nuevos récords históricos en términos de producción total y rendimiento por unidad de terreno; la producción de oleaginosas montó a 32,79 millones de toneladas, un 1,5% más; la de cultivos azucareros, a 125,2 millones de toneladas, un 4,3% más; la de algodón, a 6,6 millones de toneladas, un 10,7% más; la de carnes totalizó 79,57 millones de toneladas, un 0,4% más, y la de productos acuícolas fue de 56 millones de toneladas, un 4,2% más.
Figura 3. Incrementos de la producción de cereales en ocho años consecutivos
(Unidad: 10.000 toneladas)
Se ha llevado a la práctica en todos los sentidos la política de fortalecimiento de la base agrícola, facilitación del desarrollo rural y fomento de una vida campesina próspera. Los gastos de las haciendas de todo el país con destino a la agricultura, el campo y el campesinado alcanzaron los 2 billones 934.200 millones de yuanes, con un aumento del 21,2%; la proporción de la inversión englobada en el presupuesto central dedicada al fomento de la agricultura y a la construcción rural ha sobrepasado el 50%. Se impulsó en toda la línea el aumento de la capacidad de producción cerealera en 50 millones de toneladas, y se acrecentó la inversión en el saneamiento de ríos, en las fuentes de agua clave, y en la construcción de las grandes áreas de regadío y su reconversión para el ahorro de agua, entre otras obras prioritarias, en tanto que se dio potenciación a la construcción de obras hídricas para tierras de cultivo y al saneamiento de los ríos pequeños y medianos. A lo largo del año se añadieron 313.300 hectáreas de tierras de labranza, y se dieron por acondicionadas más de 4 millones de hectáreas de tierras de cultivo básicas de elevado estándar. Con la intensificación de los subsidios a la producción agrícola, se elevó en 5,4 yuanes el precio mínimo medio de adquisición de trigo por cada 50 kilos y, en 14 yuanes, el de arroz.
En las zonas rurales han mejorado todavía más las condiciones de producción y de vida. Se resolvió el problema de la seguridad del agua de bebida en beneficio de 63,98 millones de habitantes, maestros y alumnos en dichas zonas, haciendo alcanzar el 75% la tasa de generalización de esta seguridad. Allí se construyeron y transformaron 340.000 kilómetros de líneas de redes eléctricas, se construyeron y reconstruyeron 190.000 kilómetros de carreteras, se inició la construcción hidroeléctrica para la electrificación de 331 distritos como parte del programa del nuevo agro, y se aumentó el número de usuarios de gas metano en 2,8 millones de familias, así como en 110.000 el de usuarios de la energía generada por pequeñas centrales hidroeléctricas en sustitución de combustibles. Se rehabilitaron viviendas rurales en mal estado para 2,65 millones de familias, aumentando en 1,45 millones sobre el año precedente. Se respaldó la construcción de centros de adquisición y almacenamiento de cereales por una capacidad de 4,3 millones de toneladas, además de 115 mercados mayoristas de productos agrícolas y 186 proyectos de logística del frío para los mismos productos. Y se avanzó en profundidad en el programa de creación de 250.000 tiendas rurales y en la formación de redes de gestión en cadena para la circulación de mercancías en el campo.