La creación de este museo es sobre todo el resultado de la pasión de Lu Ruixing por este tipo de telas típicamente chinas. En la década de 1970, Lu Ruixing, apodado "el ratón de las telas", trabajaba en la Fábrica de Vestidos de Seda de Wuxi, lo que le dio la oportunidad de conocer muy de cerca esta materia textil. En aquella época conoció a alguien que, como el propio Lu Ruixing nos confiesa, ejerció una profunda influencia en él:
"En 1974 conocí a Sun Yinsong, una persona que influyó mucho en mí. Él era diseñador de la Fábrica de Sedas Teñidas y Estampadas de Wuxi. A pesar de la diferencia de edad, nos hicimos muy amigos. Sun Yinsong me mostró un álbum de pinturas de piezas de batik. Su belleza y primitivismo me impresionaron. Al ver mi emoción, Sun Yinsong decidió regalarme el álbum."