Amy Chua mira a su hija Sophia Chua-Rubenfeld practicar piano en su casa de New Haven, Connecticut, en los Estados Unidos, el pasado 20 de diciembre. [LORENZO CINIGLIO / POLARIS]

Mientras que cada vez más padres chinos adoptan un estilo de crianza de los hijos de tipo occidental, que permite a los niños disfrutar de más libertad y motivación, Amy Chua y su libro alabando el estricto estilo de enseñanza chino ha levantado una atención sin precedentes entre los estadounidenses.

Chua ha sido además portada del último número de la revista Time, lo que ha contribuido a avivar en todo el país una apasionada discusión sobre los métodos empleados por los padres chinos, entre los que se incluyen eliminar la televisión, los videojuegos, no dar por buena ninguna nota por debajo de A, y no salidas nocturnas.

Chua, de 48 años y nacida en Estados Unidos, es profesora de leyes de la China antigua en Yale. En su libro, El Himno de Batalla de la Madre-Tigre, Chua argumenta que la estricta educación que los padres chinos imponen a sus hijos les prepara mejor para la dura competición a la que tendrán que enfrentarse en el futuro.