Científicos europeos han diseñado recientemente el primer robot del mundo capaz de sentir emociones.
Nao, que presenta las mismas emociones y conductas de aprendizaje que un niño de un año de edad, es capaz de establecer lazos sentimentales con la gente que le cuida. Puede analizar el estado de ánimo de los humanos a través de una observación minuciosa de sus expresiones y su lenguaje corporal. Cuanto más tiempo lleve con una persona, más profundizará en su relación con ella y comprenderá mejor sus eomociones.
Aunque con la apariencia de un robot, Nao parece más a un bebé humano. Si está triste bajará la cabeza y los hombros. Si contento, siempre pedirá un abrazo con las manos extendidas hacia la persona más cercana. Cuando siente miedo, se encoge de repente y sólo unas cariñosas palmaditas consiguen aliviarlo.
Este pequeño robot no sólo se lleva bien con el ser humano e interactúa emocionalmente con él, sino que también puede recordar a todas las personas que han tenido contacto con él e incluso hacer juicios de valor. Muestra un particular cariño hacia aquellos que le tratan amablemente y se siente dependiente de ellos, tal como lo haría un bebé con su madre.
Según los científicos, los robots como Nao servirán en el futuro para cuidar y consolar a los ancianos solitarios. |