La región autónoma del Tíbet cubre una superficie selvática de 7.170.000 hectáreas. La cantidad acumulada de madera en pie alcanza 2.091.000.000 metros cúbicos, lo que constituye la mayor selva de China. Con el propósito de proteger el ambiente ecológico de la silvicultura tibetana, desde hace años el gobierno regional ha aplicado la tala restringida, por lo que la tala comercial anual se ha limitado a 150.000 metros cúbicos. Al mismo tiempo, se reemplazan constantemente los lugares de tala forestal, a fin de recuperar la vegetación forestal. En 2005, en los distritos Jomda, Konjo y Markam, donde hay afectaciones ecológicas en los cursos medio e inferior del río Yangtsé, se llevó a cabo el proyecto de protección de recursos de bosques naturales en el curso superior del río Yangtsé, con una inversión total de 23.713.000 yuanes. Se construyeron 2.343 hectáreas de bosque ecológico de bienestar público, acordonando las laderas (prohibido pastar y hacer leña) para facilitar la reforestación, cultivando 2 millones de diversos árboles jóvenes. Se destinaron 71.280.000 yuanes de subsidio estatal para reforestación de 327.000 hectáreas. A consecuencia, la tasa de cobertura de bosques en el Tíbet ha experimentado un constante crecimiento, de menos de 1% en los años 50 del siglo pasado a 5,93% actual, lo que ha desempeñado un papel positivo en el mejoramiento del ambiente ecológico.