laboratorios y centros estatales de investigación en ingeniería, apoyar una partida seleccionada de centros técnicos empresariales reconocidos por el Estado y propulsar la reorganización entre las instituciones de investigación en técnicas aplicadas y las empresas de producción. Hay que continuar la construcción de plataformas públicas de soporte tecnológico, potenciar servicios intermediarios como el asesoramiento técnico y la transferencia tecnológica, e intensificar la protección de los derechos de propiedad intelectual.

b) Desarrollar con mayor celeridad el sector de servicios. Hemos de realizar con buen efecto la planificación de los ámbitos prioritarios de este sector y la ejecución de los proyectos concernientes. Nos incumbe flexibilizar y reglamentar el acceso al sector y respaldar mediante políticas como las fiscales, tributarias y tarifarias el desarrollo de las áreas clave, eslabones débiles y ramas emergentes del mismo. Es necesario asimilar activamente las experiencias, tecnologías y modos de administración avanzados del mundo, con el objetivo de elevar la calidad y el nivel del sector de servicios.

c) Ajustar y optimizar la estructura industrial. Debemos llevar a la práctica las Estipulaciones Provisionales sobre el Fomento de la Reestructuración Sectorial de la Economía y el catálogo de orientaciones para este reajuste, perfeccionar el régimen de administración sobre el acceso en las diversas ramas, acelerar la reestructuración de las ramas con exceso de capacidad productiva, y estimular y apoyar la absorción y la reorganización entre las empresas siderúrgicas, cementeras, de aluminio electrolítico, carboneras, textiles, papeleras y de otros grupos, eliminando así la capacidad productiva obsoleta con arreglo a la ley. Es menester seguir de cerca los cambios en la actividad productiva de otras ramas y en la oferta y la demanda del mercado, con miras a tomar medidas oportunas para prevenir una nueva sobreabundancia de capacidad productiva. Se prevé transformar las industrias tradicionales por medio de una amplia aplicación de tecnologías informáticas avanzadas e intensificar, sobre todo, la reconversión tecnológica de ramas como las de siderurgia, materiales de obra, carbón, electricidad, petroquímica y construcción.

d) Potenciar la competitividad en las áreas medulares del sector de altas tecnologías. Vamos a proseguir los programas de ingeniería y los proyectos especiales de industrialización en altas tecnologías como biomedicinas, circuitos integrados, telefonía móvil de nueva generación, Internet de próxima generación y seguridad informática, y apresurar la puesta en escena de las políticas sectoriales relativas a software, circuitos integrados, televisión digital y biología, entre otros. Se construirán nuevos núcleos industriales de altas tecnologías en campos como la electrónica, la informática, la biología, la aeronáutica y la