La policía de Los Ángeles reveló que el Asesino Durmiente es sospechoso de haber matado a ocho personas de 1985 a 1988, pero que durante los 14 años siguientes permaneció “dormido”, de ahí su mote, hasta que de 2002 a 2007, mató a otras tres personas.

Pese a que la policía había encontrado rastros del ADN del criminal en los cuerpos de las víctimas, al comprobarlo con su base datos no encontró a ninguna persona cuya información coincidiese. Se ofrecieron entonces 500.000 dólares como recompensa, pero nadie pudo dar pistas valiosas, hasta que el pasado 30 de junio, otra investigación de ADN permitió llegar a un preso de ADN parecido al de Franklin.

De acuerdo con el análisis médico, Franklin debía ser pariente cercano del convicto y posteriormente se obtuvieron muestras de ADN del asesino en unos restos de pizza que había comido, lo que finalmente permitió identificarlo y arrestarlo oficialmente en julio pasado.

Franklin trabajaba en un garaje, pero se jubiló antes de ser arrestado. Los investigadores sospechan que en los pasados 25 años estuvo relacionado con al menos un asesinato y un caso de intento de asesinato ocurridos en el sur de Los Ángeles.

Después de enterarse de que la policía había detenido a Franklin como el Asesino Durmiente, sus vecinos quedaron sorprendidos. Algunos dijeron que el hombre había llevado en algún momento a prostitutas a su patio trasero. Tasha Cole, señaló que “Franklin puede reconocer a las diferentes prostitutas y habla sobre ellas de una forma grosera”; mientras Sherwood Howard dijo que las fotos de la parte inferior al cuello de las prostitutas desnudas las guardaba en su garaje.