A la entrada al siglo XXI, el Tíbet ha desarrollado sin cesar nuevos proyectos de turismo con características locales y estilos étnicos. Además del turismo ecológico, el alpinismo, el esquí, la expedición, el programa de viajes en vehículo, la bicicleta, la caminata, el hipismo, la remada, la caza, la pesca, el globo aerostático de aire caliente, el baño de luz solar y el baño termal han mostrado su gran potencial de explotación. Se han formado en lo preliminar cuatro zonas turísticas de Lhasa, Tíbet occidental, Tíbet suroccidental y Tíbet meridional. Actualmente el Tíbet tiene más de 60 lugares de visita, distribuidos en Xigaze, Shannan, Nagqu, Ngari y Nyingchi y centrados en la ciudad de Lhasa.

En 1993, el Tíbet abrió dos líneas circulares de turismo. La línea oriental (llamada también “línea de tres ríos”) es: Lhasa-Meizhokungka-Gongbogyainda- Nyingchi-Milin-Gyiacha-Zatang-Lhasa (se puede recorrer a dirección contraria); la línea circular occidental es: Lhasa-Xigaze-Sagar-Zhongba-Burang-Gar-Shiquanhe-Gegyai-Gerze-Coqen-Lhaze-Xigaze-Lhasa. Estos dos itinerarios permiten contemplar el valle, el bosque, el terreno montañoso, el pico nevado y el glaciar y la montaña y la estepa, así como lugares pintorescos y de valor histórico, lo que amplía espacio de actividades para los turistas. En la actualidad, el Tíbet ha abierto otras 4 líneas de paisaje natural, a saber, la ecológica Lhasa-Nyingchi-Shannan, la de peregrinación Lhasa-Xigaze-Ngari, la turística Lhasa-Xigaze-Tingri-Zham y la de visita de praderas Lhasa-Nagqu-Qinghai.

--En el norte del Tíbet la temperatura anual media está bajo cero grados Celsius. El invierno crudo dura desde octubre hasta mayo o junio del año próximo. Julio y agosto son la estación más hermosa en las praderas, con las flores en plena apertura y una temperatura agradable. En esta temporada se celebran carreras de caballos espectaculares. Así, estos meses son la época de oro para visitar el norte del Tíbet.

--En los valles del sur de la cuenca del Yarlung Zangbo, incluyendo Lhasa, Shannan, Xigaze y Nyingchi, la época del turismo dura de mayo a octubre. Especialmente de julio a septiembre, esas áreas son deliciosas y refrescantes con la temperatura mensual media de 9,4-18,7ºC. En esta época se celebran muchas fiestas locales y actividades turísticas, entre ellas la Fiesta Shoton. Sobre todo en Nyingchi y las áreas al sur de los Himalayas, tales como Zayu, Medog, Zham y Yadong, todas a menos de 2.600 metros de altitud, el clima es tibio y húmedo como la primavera a lo largo del año. Naturalmente, sirven de lugares de reposo en las vacaciones. El invierno y la primavera son temporadas ociosas para los campesinos, así que los tibetanos de todas partes de la región y de las provincias vecinas acuden de peregrinación a Lhasa, armando gran animación. En esta época se celebran muchas fiestas importantes en Lhasa, incluyendo la Asamblea de Exhortación Búdica, la Fiesta de la Linterna de Mantequilla, la Danza del Sacerdote en el Palacio Potala, el Año Nuevo Chino y el Año Nuevo Tibetano, así como las fiestas folklóricas y religiosas. La gente de las ciudades y el campo está inmersa en una atmósfera festiva, cantando y bailando al estilo local. Así pues, es una temporada ideal para emprender viajes turísticos que permiten a los visitantes conocer las costumbres, la cultura antigua y los rituales religiosos del Tíbet. Allí se concentran 5 zonas (sitios) turísticas de categoría 4A calificadas por la Administración Nacional de Turismo, entre ellas, el Monasterio Jokhang, el Palacio Potala, el Norbu Lingka, el Museo del Tíbet y el Lago Basum de Nyingchi.

--En la prefectura de Ngari en el oeste del Tíbet, la mejor temporada va de junio a septiembre, especialmente en junio y julio antes de la llegada de la época lluviosa, durante la cual los caminos están en condiciones indeseables. De noviembre a febrero del año siguiente, como los pasos de montaña suelen ser sellados por las nevadas densas en cualquier momento, las actividades turísticas son casi imposibles.

--Las diversas partes del este localizadas en las montañas y gargantas de Hengduan están cerradas por la nieve copiosa en invierno y primavera. En julio y agosto, como es una temporada de lluvias y pueden ocurrir flujos de fangos y piedras y derrumbes de tierra en cualquier instante, las actividades turísticas están prácticamente muertas. Por consiguiente, la mejor época para el turismo en el este del Tíbet son mayo, junio y septiembre.