adelantos obtenidos en la investigación de las mismas, perfeccionar el sistema de divulgación de las técnicas agrícolas y el de servicios técnicos agronómicos en los niveles de base y estimular la divulgación de los conocimientos científicos y técnicos agrícolas entre los campesinos. Cuarto: Hay que impulsar en toda la línea la reforma rural integral. Prevemos acelerar la reforma institucional de cantones y poblados, la reforma de la educación obligatoria rural y la del sistema de administración fiscal de nivel distrital y cantonal, y establecer gradualmente una estructura de administración en el campo, caracterizada por su composición selecta y alta eficiencia, un sistema de educación obligatoria rural garantizada por el Gobierno y un sistema de hacienda pública que cubra tanto las ciudades como el campo. Al mismo tiempo, se impulsará la reforma del sistema de expropiación de tierras y del sistema de derecho a bosques de propiedad colectiva, se desarrollarán dinámicamente organizaciones campesinas de cooperación especializada, y se proseguirán la liquidación y la solución de las deudas rurales.
Al impulsar la construcción de un nuevo agro socialista, es menester que situemos el centro de gravedad en el desarrollo de la economía rural y el aumento de los ingresos del campesinado. Persistiremos en estabilizar y perfeccionar los sistemas de gestión básica en las zonas rurales, actuar según las condiciones de cada lugar y partir de la realidad, respetar la voluntad de los campesinos y proteger sus derechos e intereses, y combatir el formalismo y el autoritarismo.
3. Empeñarse en cumplir con éxito el ahorro de energía, la reducción de insumos, la protección del medio ambiente y la utilización ahorrativa e intensiva de tierras.
Este año se debe tomar el ahorro de energía, la reducción de insumos, la protección del medio ambiente y el uso ahorrativo e intensivo de tierras como punto de acometida e importante asidero para el cambio de la modalidad de crecimiento ecnómico. Con referencia al ahorro de energía y la protección medioambiental, nos centraremos en los siguientes trabajos: Primero: Perfeccionar y aplicar estrictamente las normas de consumo energético y de protección medioambiental. Cualquier proyecto nuevo tiene que someterse a la revisión en cuanto a su consumo de energía y a la evaluación de su influencia sobre el medio ambiente, y no se permite que se inicie si no cumple con las normas establecidas al respecto; en cuanto a las empresas existentes, deberán suspender la producción o quedar cerradas aquellas que siguen sin cumplir dichas normas tras la rectificación. Segundo: Eliminar con firmeza la capacidad productiva atrasada. Durante el XI Quinquenio, se cerrará un número de pequeñas unidades de generación termoeléctrica que totalizan una capacidad de más de 50 millones de kilovatios, y de esta capacidad se planea reducir este año 10 millones de kilovatios; de aquí a cinco años se eliminará la capacidad de producción atrasada de hierro en 100 millones de toneladas y la de acero en 55