Las Dinastías del Sur y del Norte (420-589) fueron un periodo muy importante en la historia de la pintura china. Los continuos combates y los frecuentes cambios de dinastías incentivaron el desarrollo de la filosofía, lo cual impulsó la evolución del arte. Por tanto, aparecieron muchas pinturas murales en cuevas y mausoleos, tallados en piedras y ladrillos y pinturas de laca. También existían pintores profesionales que marcaron sus estilos independientes, por ejemplo, el mejor representante de la época fue Gu Kaizhi, conocido como el “fundador de la pintura china”.

Wu Daozi, pintor chino de la Dinastía Tang, reconocido como el “dios de la pintura” fue bastante productivo. Sus obras incluyeron más de 300 pinturas murales y más de 100 rollos registrados. El tema más común fue el budismo y el taoísmo, aunque también pintó paisajes, flores, pájaros y animales. Wu Daozi era famoso por su diferentes técnicas en el uso del pincel. Sus pinturas solían demostrar escenas grandiosas y expresar la fuerza espiritual interna. La Dinastía Tang (618-907) fue la era de la pintura de personajes. A mediados de esa dinastía, debido a la estabilidad política y la prosperidad económica, los aristócratas se dedicaron a disfrutar la vida. Ese fenómeno también afectó la pintura. Los pintores especializados en damas palaciegas, como Zhang Xuan y Zhou Fang fueron algunos representantes de ese periodo. Fueron ellos los que combinaron la técnica clásica de la pintura de personajes con la vida real. Fueron pioneros en la pintura popular de damas aristocráticas y ejercieron una gran influencia en otras obras posteriores.

 

El famoso Festival Qingming Junto al Río es una obra panorámica atribuida al artista de la Dinastía Song del Norte, Zhang Zeduan. El tema celebra el espíritu festivo y la conmoción mundana durante el festival de Qingming. Es una obra realista de gran valor y al mismo tiempo, sirve como material de estudio para que las generaciones posteriores conozcan el comercio, la artesanía, las tradiciones, la arquitectura y el tráfico en la metrópoli de la Dinastía Song del Norte. Es una reliquia histórica muy importante.