En este sentido, explica Tena, el Pabellón español es también una gran apuesta del gobierno español por China, porque “España ya está en China pero quizá no ha llegado aún al mismo nivel que algunos países europeos, y creemos que el Pabellón va a cambiar sin duda las relaciones de España con China y que va a ser muy productivo para el país”. La Comisaria comenta que la meta del gobierno en estos momentos es “sacarle el mayor provecho a la inversión que se ha hecho en la Expo, que cada euro sirva para algo y que nuestros ciudadanos sepan cuál ha sido el resultado de esta inversión” y añade que esto “ya se está viendo a corto plazo, con muchos empresarios de primer nivel y muchas autoridades que en esta primera semana ya se han acercado al Pabellón de España para explorar las posibilidades de negocio y entablar diálogos con nuestros empresarios, visitas que se van a ir multiplicando a medida que transcurra la Expo”.

Sin duda, la potente inversión que ha hecho España en esta Expo constituye una excelente tarjeta de visita para el país en el campo de los negocios. Esta inversión se ha plasmado no sólo en el Pabellón mismo, sino también en todas las actividades que se han programado para los próximos seis meses, con la participación de artistas españoles de renombre, como el Ballet español o la compañía catalana de teatro La Fura del Baus. Entre todas estas actividades destaca como programa estrella el gran festival gastronómico que se ha organizado en el Hotel Melià en Shanghai, con el que se quiere “mostrar a todos los ciudadanos chinos y empresarios del país una de las mejores gastronomías mundiales, sus productos, sus cocineros y sus platos”. El programa gastronómico, que será sin duda una excelente oportunidad para dar a conocer la cocina española en China, durará 18 semanas y tendrá cada semana como protagonista a una pareja formada por un cocinero español y otro internacional, que cocinarán juntos utilizando productos españoles.

Aquí, la Comisaria destaca también el papel fundamental que tendrán las comunidades autónomas en lo que respecta a las actividades programadas para la Expo, que están agrupadas semanalmente de forma que a cada comunidad autónoma se le ha dedicado una semana para que se presente tanto fuera del recinto, por ejemplo a través del programa gastronómico, como dentro del él, con espectáculos típicos y exposiciones de productos de cada región. Esto, comenta María Tena, “hará que la Expo sea algo muy divertido, algo que va a cambiar cada semana, con catas de vinos, espectáculos de gaiteros, diseño de calzado, una multitud de cosas diferentes” ya que “cada comunidad autónoma va a traer a la Expo su cultura, sus productos y sus empresarios, y la gente podrá venir varias veces al Pabellón porque cada vez va a ser diferente”. Además, también contribuirá a difundir la imagen de España “como un país pluricultural, que acepta la diferencia y la toma como una riqueza”.