Figura 2. Relación de equilibrio de las haciendas territoriales en 2010
La ejecución del presupuesto de la hacienda central en 2010 se sintetiza en los siguientes puntos principales:
1) Ejecución de los ingresos presupuestarios y utilización de los sobreingresos de la hacienda central
El que los ingresos de la hacienda central en 2010 hayan registrado en términos generales un aumento relativamente rápido constituye un reflejo global de factores como el desarrollo económico, el alza de los precios y el nivel más bien bajo de la cifra base de los ingresos fiscales de 2009. El sobrecumplimiento presupuestario en una cantidad de 441.000 millones de yuanes se deriva principalmente de que, en la ejecución, algunos de los pertinentes índices económicos tomados como referencia para calcular a comienzos del año las programaciones presupuestarias de los ingresos han sobrepasado mucho las previsiones de entonces. Por un lado, el volumen global de las importaciones y exportaciones en 2010 ha aumentado en un 34,7% (las exportaciones, en un 38,7%), por encima del 8% previsto a principios del año, siendo de 286.500 millones de yuanes el sobreingreso correspondiente a los derechos aduaneros sobre los eslabones de la importación; y por el otro, las ventas de los vehículos motorizados han crecido un 32,4%, con lo que el impuesto a su adquisición y el impuesto sobre el consumo han abonado unos sobreingresos de 128.500 millones de yuanes. Ambas circunstancias configuran el 94,1% del sobrecumplimiento presupuestario de los ingresos fiscales de la hacienda central, mientras que los demás ingresos se han ceñido fundamentalmente a lo presupuestado.
Principales ingresos de la hacienda central. Por el impuesto al valor agregado interno, 1 billón 589.559 millones de yuanes, el 103,6% de lo presupuestado, con un aumento del 14,2%; por el impuesto sobre el consumo interno, 607.154 millones, el 115,8% de lo presupuestado, un 27,5% más; por el impuesto sobre el valor agregado y el impuesto sobre el consumo de productos importados, 1 billón 48.746 millones, el 130%, un 35,7% más; por aranceles, 202.745 millones, el 128,3%, un 36,6% más; por las desgravaciones a la exportación por concepto del valor agregado y del consumo, 732.731 millones (tratados como ingresos deducidos en los libros contables), el 103,6%, un 13% más; por el impuesto sobre la renta empresarial, 779.425 millones, el 96,7%, un 2,3% más; por el impuesto sobre la renta personal, 290.285 millones, el 114,2%, un 22,6% más; por el impuesto del timbre para las operaciones en valores, 52.782 millones, el 102,3%, un 6,6% más; por el impuesto a la adquisición de vehículos motorizados, 179.203 millones, el 133,9%, un 54% más, y por los ingresos no tributarios, 196.801 millones, el 94,8%, un 22,9% menos.