3) Realizar de forma efectiva y apropiada la labor relativa a la seguridad social. Hay que poner en práctica los procedimientos para la transferencia y continuación de la titularidad del seguro de vejez y el seguro médico, elevando el grado de coordinación de los seguros sociales. Se completará el mecanismo de reajuste normal de las normas de las pensiones de vejez básicas de los jubilados de las empresas, así como las de garantización del nivel de vida mínimo tanto para la población urbana como para la rural. Se impulsará dinámicamente la reforma del sistema del seguro de vejez de los organismos e instituciones públicos, y se extenderá el alcance del ensayo del nuevo tipo de seguro de vejez social en las zonas rurales. En 2011 los suscriptores urbanos del seguro de vejez aumentarán en 8.270.000; los del médico, en 7.940.000; los del seguro de desempleo, en 1.240.000, y los del seguro de accidentes laborales, en 8.270.000. Para acelerar el desarrollo de los servicios de asistencia social y bienestar social, se fortalecerá la construcción de instalaciones para casas de bienestar infantil, para la rehabilitación de discapacitados y para los servicios a la tercera edad. En 2011 el número de camas en los asilos de ancianos subirá un 9,9%, hasta 20 por cada mil ancianos, y el de instalaciones de servicios para discapacitados ascenderá a 3.230, un 8,6% más.
4) Impulsar con celeridad la implantación del sistema de garantización de vivienda. Vamos a intensificar la ejecución del programa de viviendas de protección social; emprender a gran escala la construcción de tales, como en el caso de los pisos públicos de arriendo; acelerar la transformación de los núcleos de chabolas en las áreas urbanas, industriales, mineras, forestales y roturadas entre otras; establecer mecanismos estables, uno de inversión gubernamental y otro de garantía de amortización de fondos sociales; dar prioridad a los planes de provisión de terrenos y construcción, y estimular la participación de los fondos sociales en la construcción y el funcionamiento de pisos públicos de arriendo. Se va a seguir aumentando la provisión efectiva de viviendas comerciales, elevar la proporción de los apartamentos pequeños o medianos y de precios bajos o medios, y reglamentar el desarrollo del mercado de arrendamiento de viviendas. Se llevará a la práctica y se perfeccionará en mayor medida la política de regulación y control de bienes inmuebles, para inhibir la demanda de la inversión especuladora y contener el alza desmesurada de los precios de vivienda. Se trabajará con empeño para perfeccionar el régimen y el sistema de políticas relativos a la vivienda acordes a las condiciones nacionales, en aras de formar un mecanismo de efecto duradero susceptible de regular eficazmente la oferta y la demanda de viviendas.
5) Reforzar la construcción en los dominios educacionales prioritarios. Aplicaremos totalmente el Programa Estatal a Medio y Largo Plazo para la Reforma y el Desarrollo Educacionales. Debemos agilizar la transformación de las escuelas rurales de primaria y secundaria que presentan vulnerabilidades, y continuar impulsando la construcción del Programa de Rehabilitación de Edificios Escolares Rurales del Primer Ciclo de Enseñanza Secundaria en el Centro y el Oeste y del Programa Nacional para la Seguridad de los Edificios Escolares de Primaria y Secundaria, y el fomento de la capacidad básica para la formación profesional. Hemos de desarrollar vigorosamente la educación preescolar en el campo, conceder importancia a la educación especial, perfeccionar la educación del ciclo superior de la enseñanza secundaria y la formación profesional, y apoyar la construcción de centros docentes étnicos y la educación bilingüe en las zonas étnicas. Propulsaremos la construcción de dormitorios de necesidad eventual para los maestros de las escuelas rurales en las áreas fronterizas y apartadas y de condiciones duras. Vamos a mejorar la calidad de la enseñanza superior, acelerando el establecimiento de universidades y disciplinas de primer orden. Se resolverá de forma adecuada el problema de escolarización de los hijos de las familias necesitadas. Para 2011 se espera que la tasa bruta de matriculación en el segundo ciclo de secundaria alcance el 84%, y se planea admitir a 6.750.000 nuevos estudiantes en carreras medias y completas en los centros de enseñanza superior general, y a 560.000 en los de posgrado.