La región autónoma uigur de Xinjiang tiene hoy 16 puertos de clase A, donde los vehículos de transporte extranjeros pueden entregar las mercancías en directo y la gente puede hacer negocios con cualquier país. Dos de ellos son aeropuertos y los otros son puertos terrestres. Aparte de ellos, hay 11 puertos de clase B, en los cuales tanto el renminbi como el dólar americano pueden usarse en las transacciones.
Las ventajas de Xinjiang en ubicación geográfica y recursos humanos son ideales para desarrollar el comercio fronterizo. La región comparte fronteras con ocho países, incluyendo Rusia y Kazajstán. Las lenguas locales son similares a las de varios de los países vecinos, y los credos religiosos y costumbres de los residentes lo son también.
En 1986, el entonces Ministerio de Comercio Exterior y Cooperación Económica – predecesor del actual Ministerio de Comercio – autorizó oficialmente a la región a emprender el comercio fronterizo, principalmente con la Unión Soviética y los países de Europa oriental.
Entre 1991 y 2000, el comercio bilateral entre Xinjiang y los cinco países de Asia Central aumentó en un promedio anual de 45%, alcanzando un total acumulativo de US$6.900 millones. El comercio con Kazajstán, Kirguizistán y Tayikistán representa el 70% del total.
Anteriormente, el comercio fronterizo se realizaba sólo en las zonas de cooperación económica de clase A localizadas en Yining, Bole y Tacheng. Luego, en 1993, Xinjiang comenzó a ratificar el establecimiento de puertos de clase B para facilitar el comercio en aumento.