A fin de elevar el nivel del uniforme militar chino, al tiempo de aprobar en enero de 1984 la producción definitiva del modelo 85, la Comisión Militar Central ordenó desarrollar las series de vestidos ceremonial, ordinario y de combate y maniobra. A comienzos de 1985, el Departamento General de Logística organizó un grupo encargado de la reforma del uniforme, dando inicio a una serie de estudios al respecto.

Luego de recoger y analizar pruebas de uniforme militar de 27 países y asimilar las experiencias propias en las reformas pasadas, los investigadores realizaron múltiples estudios y disertaciones sobre la viabilidad en materia de gastos, recursos estatales, nivel económico y equipos existentes.

Tras de medir tallas de 15.000 oficiales y soldados de 83 unidades de nivel superior al regimiento y calcular casi un millón de datos, los investigadores determinaron el nuevo modelo del uniforme. Paralelamente se produjo cierta cantidad de muestras para ensayarlas en unidades de diferentes zonas para recaudar sus opiniones sobre la adaptabilidad, la higiene y la preservación térmica del nuevo uniforme.

En la reunión de evaluación de todo el ejército efectuado el 7 de noviembre de 1985, se presentó un plan de reforma general sobre el modelo, la tela y el color de los vestidos ceremonial, ordinario y de combate y maniobra, así como las ropas invernales complementarias y el estándar y método de provisión.

En julio de 1987, los dirigentes del Partido y Estado examinaron las pruebas y en agosto la Comisión Militar Central ratificó el modelo definitivo. A partir del 1 de octubre de 1988 se equipó con el nuevo uniforme de modelo 87 a las diversas unidades.

Este modelo abarcó tres tipos de vestidos: ceremonial, ordinario y de combate y maniobra.