Asimismo, la cortina de agua obligó a las autoridades a cerrar las principales autopistas de acceso, tanto en el norte como en el centro y sur de la ciudad.
Como consecuencia del temporal, los aeropuertos de Ezeiza, de vuelos internacionales, y el Metropolitano, de vuelos domésticos y regionales, debieron espaciar las salidas y llegadas.
Además, las seis líneas de subterráneos de la ciudad suspendieron sus servicios y, pasadas las 10 de la noche, hora local (01GMT del viernes) prestaban un servicio restringido.
En medio de ese panorama, las compañías de electricidad locales Edenor y Edesur suspendieron la provisión del servicio a cinco barrios, "de forma preventiva", por la cantidad de agua caída, lo que llevó a decenas de habitantes a cortar calles, en señal de protesta.
La voz oficial de la ciudad la hizo conocer el jefe de Gabinete, Horacio Rodríguez Larreta, quien luego de destacar que había "400 personas trabajando en la calle", admitió que "hasta que no se avance con más obras, la ciudad se va a inundar".
Lo inusual de la tormenta provocó que todos los canales de televisión de la ciudad interrumpieran sus programaciones habituales para dar cobertura al fenómeno que, según el SMN, podría repetirse entre el sábado y el domingo, con lluvias y eventual caída de granizo.