Zelaya fue forzado al exilio en Costa Rica después que soldados entraran a su palacio la mañana del domingo.
Zelaya, fue invitado a dirigirse a la Asamblea General por el presidente, Miguel D'Escoto Brockmann, quien dijo el lunes que "he enviado una carta al presidente de Honduras... para que venga a las Naciones Unidas y se dirija a la Asamblea General tan pronto como sea posible y nos de un reporte actualizado sobre los acontecimientos en su país".
Zelaya, quien estaba en una reunión de emergencia de líderes regionales en Managua, capital de Nicaragua, dijo el lunes que volvería a Honduras el jueves.