En 1986, los medios volvían a marcar tendencias: un informe que afirmaba que las faldas amarillas eran las más llevadas en Beijing por parte del China Textile Newspaper (diario textil chino) conllevó la fama a nivel estatal de las mismas. A finales de los 80 las minifaldas cada vez tenían más éxito entre las chinas, quienes más tarde se acostumbrarían a llevarlas con jerséis durante la primavera y otoño. Entonces, la copa de estilos era la manera de ir a la moda, y las chicas no se avergonzaban de vestir como las demás.
Los vestidos rojos están de moda
A finales de los 80, los desfiles empezaron a formar parte de la vida cultura. Así como las modelos profesionales, la gente se interesaba mucho en organizar equipos amateur para los más mayores y los niños. La moda china pronto se vio integrada en las tendencias globales.
Estilos individuales.
Desde los 90, la máquina de cose deja de ser una necesidad vital para muchas familias chinas. La gente empieza a comprar ropa ya fabricada, y gran parte del trabajo de las antaño fructíferas sastrerías conllevaba ahora la alteración de las prendas. China se ha convertido en el mayor productor y consumidor de ropa del mundo. Las grandes ciudades no sólo disponen de varias tiendas franquiciadas de famosas marcas tanto domésticas como internacionales, sino también de innumerables puestos donde se venden prendas a bajo coste. Los consumidores, en especial la gente joven, prefieren darse una vuelta por los mercados de prendas y vestir de manera diferente. “Puedo vestir como me plazca” es la actitud que prevalece. Llevar las mismas prendas o colores que los demás empieza a avergonzar. Una revista de moda resume la globalización de la moda así: no es ninguna sorpresa que un vestido de moda vendido en Milan o Paris pueda un día ser llevado por una mujer de Beijing y al otro por una de Shanghai.
Los estilos Hip-hop y skater son lo último entre los jóvenes urbanitas
La manera de vestir de las estrellas tiene una influencia importante en la elección de prendas por parte de los más jóvenes. Al contrario que sus padres, se ponen conjuntos de calle sin dudarlo. La importancia del color en la ropa masculina ha alterado en sus cimientos el antiguo y soso atavío de la China antigua. Además, los cambios en la ropa de mujer han confundido a las más mayores generaciones. La moda de las combinaciones, por ejemplo, duró al menos dos años. Al principio se llevaban con abrigos. Al hacer más simples los abrigos, el material cada vez es más y más transparente y ligero. Las combinaciones empezaron a popularizarse a partir del 1998, y todavía siguen de moda.
El gusto en el vestir se ha convertido en una cuestión de gusto personal y personalidad individual. De la misma manera que lo es el estilo, el material escogido también es importante. Los materiales naturales como el algodón puro también son bastante conocidos. Otros más caros como la cashmira han pasado a formar parte también de la vida diaria de los ciudadanos, mientras algunas estrellas de moda se dedican a promocionar la ética en el vestir. “Es horrible el pensar que me visto a costa de la vida de un animal”, apuntó la famosa actriz china Sun Li, quien nunca lleva pieles y fue galardonada en “Los mejores vestidos de 2008” por Personas por un trato ético a los animales, organización internacional en defensa de los derechos de los animales.