Algo infalible en la cena de noche vieja en el norte de China es la presencia de los ravioles, una comida hecha con envueltas delgadas de harina de trigo y rellenos. Los rellenos varían de carnes, frutas y verduras, y el arte culinario de cada provincia.
En algunas regiones se ponen caramelo, cacahuetes y dátiles en los rellenos, que significan buenos augurios para el Año Nuevo.
Los ravioles suenan en chino "viene el Año Nuevo en la hora zero", por lo tanto, muchos chinos también comen ravioles al tocar la campana de las doce de la noche. Además, los ravioles con forma parecida a media luna o lingotes de oro simboliza una felicidad completa y riqueza.
En el sur, la gente prepara una especie de torta hecha de arroz glutinosos cocido. El relleno de la torta varía, pero su sabor es generalmente dulce.