6 de septiembre de 2011. Un visitante aprecia una miniatura en oro del primer portaaviones de China en el Museo Militar de la Revolución del Pueblo Chino, en Beijing. CFP

En respuesta a la opinión de que la posesión de un portaaviones por parte de China supone una amenaza para los países vecinos, Yang Yi, almirante y ex director del Instituto de Estudios Estratégicos de la Universidad de Defensa Nacional del Ejército Popular de Liberación de China, manifestó: “La capacidad militar de las fuerzas armadas de un país no es un criterio adecuado para definir si un país representa o no una amenaza. Los fines estratégicos, las políticas que sigue y el uso de su poder militar sí lo son”. El buque no solo puede ser usado para ataque y defensa, sino también para el mantenimiento de la paz mundial y en operaciones de rescate tras desastres. Tal y como dijo Geng Yansheng, vocero del Ministerio de Defensa Nacional de China, “la política de defensa nacional siempre ha insistido en este punto y no va a ser modificada porque China posea armamento avanzado”.

El Liaoning todavía está en pruebas

La entrega del primer portaaviones a la Armada es un hito en la historia del desarrollo de China. Sin embargo, la incorporación del Liaoning solo es el primer paso en el desarrollo de un portaaviones.

Como todos sabemos, el portaaviones es un gigantesco buque, fruto de la combinación de numerosas tecnologías avanzadas. Cuando un nuevo portaaviones se pone en servicio, no solo los dispositivos y sistemas del buque necesitan de ensayos y reajustes, sino que también requiere ser coordinado con otros buques. El adiestramiento de los pilotos de aviones de combate y la coordinación entre el buque y los cazas requiere de mucho tiempo y de la realización de numerosos ejercicios.

Song Zhongping, instructor retirado del Segundo Cuerpo de Artillería, también afirma que, de momento, el problema principal del Liaoning son las pruebas de funcionamiento y la adaptación de los diferentes sistemas. Lleva tiempo realizar un trabajo efectivo en alta mar.

Hay que resaltar que la tecnología y los equipos del Liaoning no están al nivel de los de EE.UU., que cuenta con cien años de experiencia en la construcción de portaaviones. En comparación con los demás países que tienen portaaviones, como Francia o Rusia, a China le falta mucho por mejorar en operaciones prácticas y en capacidad de combate usando portaaviones.

“Tras la entrega del Liaoning seguirán los experimentos científicos y el adiestramiento de los efectivos militares”, manifestó el 27 de septiembre Yang Yujun, vocero del Ministerio de Defensa Nacional de China.

 

Fuente: China Hoy