El discurso pronunciado por el jefe de estado chino presenta al mundo la firme convicción para unir al mundo en un solo conjunto, aunando esfuerzos para someter todo nacionalismo aislacionista, y escuchando voces de todos los rincones del planeta para facilitar la integración internacional por medio de la conectividad.

La idea es inclusiva. Tal y como lo indicó el jefe de estado chino, la construcción de la Franja y la Ruta no pretende dejar a nadie atrás, “no busca formar un grupo pequeño” ni elitista. Por el contrario, este proyecto transcontinental busca “crear una enorme familia de coexistencia armoniosa”. Es una iniciativa que demanda el establecimiento de un entorno de paz y armonía para poder materializar la transferencia de riqueza a regiones anteriormente aisladas.

Las palabras de Xi Jinping pronunciadas en la inauguración de este magno evento marcan un hito en la historia de los procesos de integración mundial. El esfuerzo conjunto y coordinado de todas las partes logrará sortear las barreras geográficas establecidas por la naturaleza, extendiendo la riqueza de núcleos generadores de bienestar a otras partes, y estimulando el surgimiento de nuevos centros en lugares anteriormente aislados.

El presidente de China fue enfático al afirmar que la Franja y la Ruta no solo engloba a los estados en Asia, Europa y África, sino a los del mundo entero. “Todos los países, ya sea de Asia, Europa, África o las Américas, pueden ser socios internacionales de cooperación en la Iniciativa de la Franja y la Ruta”. Los países de América Latina, principalmente los del cono sur, han expresado abiertamente su interés por ser parte de este proceso integrador, justificando el potencial que tiene la región para complementar los procesos que se están gestando en el resto del mundo.

Xi Jinping ha presentado al mundo una propuesta integradora que busca el beneficio compartido por medio de la conectividad y una buena comunicación. Desde 2013, año en el que se escuchó por primera vez esta iniciativa, el mundo ha cosechado ya importantes frutos, especialmente en las regiones de Asia Central. El Foro de Cooperación Internacional de hoy será un parteaguas no solo en la historia de China sino en la historia de las integraciones transcontinentales.

El potencial que reviste esta iniciativa no está libre de retos que los integrantes deberán sortear conjuntamente. Ese es el valor que cobra el Foro de Cooperación Internacional de la Franja y la Ruta: la edificación de un mecanismo sistemático que mejore la comunicación y la coordinación a lo largo de la ruta, un elemento con el que no contó la antigua ruta comercial y que hoy, gracias a la propuesta del presidente Xi Jinping, cada vez más es una realidad.