Por Jorge Fernández

 

El Foro de Cooperación Internacional marca un punto de inflexión en la creación de centros generadores de riqueza en lugares geográficamente apartados.

 

Conseguir sentar a las figuras más importantes de la escena internacional bajo un mismo techo, y hacerles participar en un proyecto orientado a la integración transcontinental, evidencia el poder de convocatoria que tiene el presidente de China, Xi Jinping, en cada uno de los rincones del planeta.

El domingo 14 de mayo, con el discurso pronunciado por el mandatario chino, quedó oficialmente inaugurado el Foro de Cooperación Internacional de la Franja y la Ruta, una cita a la que asisten estrategas mundiales que coinciden en la meta común de revertir toda tendencia proteccionista y aislacionista.

Hoy la nueva Ruta de la Seda del siglo XXI se distingue de su antecesora por la poderosa ayuda que ofrece la modernidad para estrechar distancias y mejorar la comunicación entre la comunidad de naciones. La incorporación a la iniciativa lanzada por el presidente Xi Jinping revela la disposición del mundo para fortalecer la cooperación y edificar conjuntamente una Franja y una Ruta para el beneficio de todos.

“No se trata de reinventar la rueda” indicó el presidente Xi Jinping en su discurso inaugural. Por el contrario, se trata de potenciar los trabajos desplegados individualmente por las partes, buscando afanosamente entre los integrantes de esta iniciativa los puntos complementarios, a fin de multiplicar de manera innovadora todo tipo de fortalezas.

Este foro internacional es un punto de inflexión en la invitación que China hace al mundo para construir un mundo entrelazado. Es un laboratorio de ideas de muy alto nivel en el que se sistematizará la coordinación entre países a lo largo de la Franja y la Ruta, lo que resultará en la incubación de novedosas ideas a nivel bilateral y multilateral.

El sueño chino, que busca edificar junto con otros países un mundo interconectado, ha quedado fortalecido con el anuncio hecho por el presidente Xi Jinping de añadir 14 mil 500 millones de dólares al Fondo de la Ruta de la Seda. La contribución añade fortaleza a la idea compartida de edificar una red internacional que facilite el intercambio de bienes, personas y servicios.

La Iniciativa de la Franja y la Ruta lleva implícita la tarea de construir sólidamente un sistema económico sostenible a largo plazo. Es por ello que además de jefes de estado, están entre las filas de este foro líderes de las organizaciones internacionales, económicas y financieras más influyentes del mundo.