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spanish.china.org.cn | 24. 10. 2014 | Editor: Claudia Leng [A A A]

Top 10 sitios para disfrutar el otoño en China: Pradera Bashang

Palabras clave: otoño, China, turismo

Río Tuligen

A finales de la dinastía Qing, se declinó el poderío del país. Fueron destruidos gravemente los recursos forestales de los cotos de caza imperiales. El Weichang se convirtió muy desértico. Las arenas flotaban en el cielo y desaparecieron los animales. El norte y oeste de Saihanba se colinda con Keshiketeng y Duolun de Mongolia Interior a través del Río Tuligen. En los senderos montañosos de decenas de kilómetros a lo largo de Duolun, Yudaokou y Sandaohekou, fluye el Río Tuligen. A su izquierda está el desierto Hunshandake. Los pocos árboles se distribuyen en las laderas, las hierbas bajas no pueden cubrir las arenas. Es gravemente desertificado el lugar. Mientras a su derecha, se encuentra la montaña con exuberantes árboles. El desierto Hunshandake devora los pastos de un lado del río. No obstante en el otro lado, son abundantes los árboles. La gente puede pararse en este lugar para ver el fuerte contraste entre las dos topografías de las dos orillas del río y tener una reflexión.

Templo Saihan

En la tierra que fue coto de caza imperial, existe una leyenda. En la dinastía Qing, la caza en otoño es un evento importante de la familia real. Una vez, el emperador Kangxi, con los miembros de la realeza y decenas de miles de soldados, volvió a Weichang. Lamentablemente no había buen tiempo y llovía sin cesar. Se marchaba lentamente. Alguien propuso al emperador seguir la marcha cuando cesaría la lluvia. Kangxi miró hacia el cielo y dijo que “deberíamos marcharnos aún cuando caiga la lluvia roja”. Inmediatamente cayó la lluvia roja. Kangxi se sintió extraño: “¿acaso algunas cosas quieren ser concedido un título?” En ese momento, Kangxi vio un pequeño estanque frente a él y un sapo dorado se encontró en una piedra en el estanque. Kangxi le dijo, “si puedes hacer dejar de llover, te concederá el título del Buda Lingyan (exacto) de Saibei”. El sapo desapareció y en un instante el tiempo se despejó. Entonces Kangxi mandó la construcción de un pequeño templo en el lugar y le otorgó el nombre de “Buda Lingyan de Saibei”, llamado también “Buda Saihan”. Es un buda muy eficaz. Dicen que las personas perdidas en el bosque, podrán encontrar el camino a casa al rendir culto al sapo dorado.


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