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spanish.china.org.cn | 24. 03. 2014 | Editor: Sonia | [A A A] |
La ex primera dama, Laura Bush (centro) a su salida del restaurante Tianjin Baijiaoyuan donde almorzó. Beijing, noviembre de 2005.
(SPANISH.CHINA.ORG.CN)-Los líderes extranjeros con frecuencia optan por las especialidades de China, en vez de la comida en casa. Por lo tanto, la mesa se ha convertido en una plataforma para conectarse con los ciudadanos locales.
La primera dama estadounidense Michelle Obama alcanzó los titulares el sábado por la noche cuando cenó en el restaurante de pato pekinés, Da Dong.
La primera dama había reservado un asiento, pero no se reunió con su madre e hijas a la mesa.
Como todos los mortales, los jefes de Estado, sus cónyuges y otros líderes- y sus familias- por supuesto tienen que comer durante su visita a China. Muchos optan por ir a restaurantes locales para obtener una verdadera probadita de China.
La ex primera dama, Laura Bush, por ejemplo, cenó en Tianjin Baijiaoyuan, un restaurante especializado en jiaozi (empanaditas) en el área de Xidan en Beijing, el 20 de noviembre de 2005.
Los jiaozi, o empanaditas hervidas, son una comida típica en China. Tradicionalmente se los comía como un bocadillo especial durante el Festival de Primavera, la celebración más importante de China. Sin embargo, hoy en día son consumidos tan frecuentemente que se han convertido en una comida común.
Tianjin Baijiaoyuan es asequible y ofrece tanto jiaozi como populares platillos caseros fritos. El restaurante se ganó un récord mundial por producir 229 tipos de jiaozi.
Bush planeaba quedarse 40 minutos, pero se quedó en el restaurante durante 70. Sus acompañantes probaron jiaozi con más de 10 rellenos, incluyendo puerco con apio, tomate y huevos y cordero con cilantro. Bush dijo a la administración del restaurante que su favorito había sido el de puerco con judías.
La primera dama también pidió platillos fritos- hongos con costillas de puerco marinadas en soya, pollo frito con nueces y pasta de judías y granos de maíz tiernos con piñones.
A Bush le gustó tanto la comida que volvió al restaurante de nuevo, durante los Juegos Olímpicos de 2008 en Beijing.
El menú del restaurante también muestra fotografías del ex secretario de Estado estadounidense, Colin Powell, quien lo visitó en 2004.
Luego de la visita de Bush, el restaurante desarrolló un “menú del día de la señora Bush”, con lo que atrajo a cientos de nuevos clientes locales.