"No hay ni un metro llano". Ésta es la impresión que se llevan los visitantes de Guizhou, provincia del sudeste chino cuyo 80 por ciento es terreno montañoso. El aeropuerto Longdongbao de la capital provincial -Guiyang- fue construido después de dinamitar y arrasar once colinas. Quizás precisamente por sus inaccesibles condiciones geográficas, Guizhou ha logrado preservar sus peculiaridades y se ha convertido en estos últimos años en una de las zonas turísticas más solicitadas de China. Vamos a escuchar en primer lugar las palabras de Yang Junjiang, periodista del Diario de Guizhou, quien ha viajado por todos los lugares de esa provincia, y nos conmentará sobre las montañas de Guizhou.
Sonido1: "En Guizhou hay muchas montañas muy famosas. La montaña Qianling de Guiyang es conocida popularmente como la "Primera montaña del sur de Guizhou" gracias a sus abundantes cuevas cársticas y altos árboles legendarios. El monte Fanjing de la cordillera Wuling posee la selva primitiva más abundante del mundo entre las situadas en su misma latitud?"
En el monte Fanjing, se conservan estratos de hace catorce mil millones de años, viven más de 2.600 especies de seres vivos y no faltan plantas exóticas de hasta 70 millones de años, como el gongtong y mirto, y animales únicos como el mono dorado, especie que únicamente puede encontrarse en China. Recientemente, esta zona forestal ha sido declarada parque nacional por el Gobierno central.
Se alarga por el sudeste de la provincia la sierra Miaoling, cuyo montaña Leigong, escarpada y abrupta, está cubierto por otra jungla primitiva. Por el oeste de Guizhou se suceden también los bosques de piedras que, como una serie de museos naturales, nos muestran la evolución de la historia geológica durante miles años. El mejor ejemplo de estas selvas de piedra es el de Tianxingqiao, especialmente llamativo porque se encuentra dividido entre la tierra y el agua.