BEIJING 21 abr (SPANISH.CHINA.ORG.CN) – Amarga fue la noche de ayer en Milán para el F.C. Barcelona. Acostumbrados a una racha de bonanza sobre el terreno de juego, el equipo de Guardiola falló en un momento clave, cuando está pendiente la clasificación para la final de la Liga de Campeones en el Santiago Bernabéu.

El marcador lo abrió, sin embargo, el Barcelona. Un gol de Pedro en el minuto 18 pareció servir de relajante al equipo azulgrana, que desde ese momento pareció perder fuelle, a pesar de sus serias tentativas por pelear sobre el campo.

Pero frente tenía a un Inter de Milán que ha ido ganando cuerpo y contundencia en su juego. El Inter de Mourinho y Eto’o, un equipo con un juego ofensivo que va directo a marcar. Los italianos estuvieron más fuertes, con más energía y entereza. Así llegó el gol de Sneijder en el minuto 30, tras una asistencia de Milito, quien también la puso a punto para el segundo de los milaneses, obra de Maicon en el minuto 48. Y en el minuto 61, Milito se ahorró intermediarios y remató de cabeza directamente para clavar el 3-1.

El Barça quiso reaccionar tras el segundo del Inter, pero le fallaron las energías y sus esfuerzos quedaron en vano. Habrá que ver cómo soluciona la vuelta en el Camp Nou. Será preciso un 2-0 para agarrar la final en Madrid.