El entrenador del seleccionado argentino de fútbol, Diego Maradona, aseguró hoy que en el partido del sábado próximo saldrán a "meter en un arco a Brasil", aunque sin perder el respeto a sus clásicos rivales.
Los jugadores "tienen ganas, ilusión, están enchufados (motivados), saben que lo necesita el país, que lo necesita la gente, esta es la gran oportunidad", declaró sobre el partido correspondiente a la fecha número 15 de las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial Sudáfrica 2010.
Maradona se mostró feliz por el ánimo que muestran sus dirigidos y de que se hayan despejado las incógnitas que se le presentaban, al señalar que "fueron 30 días de lluvia permanente y salió el sol de repente".
"Soy feliz, como nunca, de ser el técnico de la Selección Argentina, porque en esta semana durísima, que teníamos que resolver un montón de cosas, tuve al lado mío hombres que me ayudaron a armar un equipo que antes que yo los tuviera acá, había muchas incógnitas", indicó.
En una rueda de prensa ofrecida en el predio de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) en Ezeiza, en la periferia sur de Buenos Aires, el ex futbolista resaltó quesu seleccionado "llega muy bien".
En ese sentido, describió: "Estamos ansiosos de que llegue la hora del partido, pero con mucho respeto hacia brasil, quee es el campeón de (la Copa de) las Confederaciones, que tiene muy buenos jugadores, pero nosotros también tenemos lo nuestro".
Precisó que su intención "es salir a ahogar a Brasil, pero por ahí nos roban la idea ellos", alertó, y abundó que "la idea es ir a buscarlos, meterlos en un arco y estar enfocados en que Robinho, Kaká y Luiz Fabiano no te agarren (desprevenidos) en un contragolpe".
"Tenemos un gran respeto por Brasil, sabemos que no te perdonan, pero estamos confiados", puntualizó.
Maradona, de 48 años, admitió que si triunfan el sábado la clasificación para Sudáfrica estaría asegurada, pero se manifestó despreocupado por las críticas a su trabajo como entrenador.
"Ganándole a Brasil el equipo estaría clasificado, pero yo no sería ni más lindo ni más feo, ni mejor persona ni peor persona, ni mejor o peor entrenador. Eso no me importa", enfatizó.
"Los especialistas que hablan de fútbol (en los medios de prensa) y que los veo todos los días son cansadores, yo les daría un equipo a cada uno, por eso estoy tan tranquilo: más los escucho hablar y más me quiero", concluyó.