Ecuador
“Cuando nos hacemos amigos de corazón con ellos y les respetamos sinceramente, nos darán su confianza.”
11 años después, Cao Minquan, gerente chino del departamento de protección ambiental, salud y asuntos de comunidades de la compañía petrolera Andes, ya habla fluidamente el español, luego de que antes no se atrevía ni a abrir la boca. “El respeto es mutuo. Espero atraer a los nativos con la cultura china y hacerles saber la importancia de la tolerancia, el respeto y la convivencia armoniosa.” Dijo que “tanto los funcionarios gubernamentales, habitantes locales como empleados de la emrpesa, cuando nos hacemos amigos de corazón con ellos, consideramos sus intereses como nuestros propios y les respetamos sinceramente, nos dan su confianza.”
En 2006, PetroChina y Sinopec adquirieron conjuntamente los capitales del petróleo y gasuductos de la empresa canadiense de petróleo Encana en Ecuador y establecieron la compañía petrolera Andes. Ecuador cuenta con una gran reserva de petróleo, pero la mayoría se halla en sitios geográficamente especiales. Por ejemplo las tres zonas petroleras de la empresa Andes, con una extensión de 5.800 kilómetros cuadrados, están situadas en la cuenca del Amazonas y un parque forestal nacional. En consecuencia el gobierno exige estrictamente estudios sobre el impacto ambiental de la exploración.
Mauricio, gerente del departamento de protección ambiental, salud y asuntos de comunidades de la empresa indicó que en Ecuador existen 8 leyes o reglamentos relacionados con la explotación del petróleo y gas y la protección ambiental. “El mayor reto de la inversión en la localidad es la cuestión de la protección ambiental”, dijo, agregando que “para cualquier operación se debe presentar un informe del medio ambiente: qué animales y plantas hay en la zona petrolera, la cantidad de los microelementos y metales pesados en el suelo, las influencia directa o indirecta de la operación a la comunidad, entre otros.”
En 2011, un pequeño accidente de fuga de 4 barriles de petróleo provocó la pérdida de más de un millón de dólares a la empresa. A fin de evitar accidentes similares, la empresa instaló el sistema de supervisión de fuga por fibras, el más avanzado del mundo. Una vez que ocurre una fuga, el sistema emite una alarma automáticamente y se suspende el transporte.
“No hay que tener la mentalidad de suerte. Todas las molestias pequeñas se convertirán en grandes problemas. Las leyes locales no lo permiten, tampoco están contentos los habitantes locales.” Cao Minquan señaló que “nuestros sistemas de prevención de incendios, construcción y administración empresarial adoptan el máximo estándar mundial. Usamos los mejores motores para reducir la contaminación del aire. Puedo garantizar que somos el estándar más alto de aquí.”
El corazón de la gente es más difícil de tratar que el medio ambiente. “La engorda de un delgado es nuestra responsabilidad”, bromeó Cao Minquan explicando la relación entre la empresa y sus empleados. Aquella ofrece buenos alimentos y hay una gran oportunidad de “engordar”, hecho que posiblemente aumenta la tasa de enfermedad cardiovascular. Por eso la empresa creó específicamente un gimnasio bien equipado e invitó a los expertos de la enseñanza de la salud, y el diseño de planes de entrenamiento físico y de dieta, para cuidar integralmente la salud de los empleados.
En los primeros días del desarrollo de la empresa, también recibió la oposición de los residentes como otras empresas del mismo sector. Fuera del campo de la zona petrolera todavía se conserva un alambre de púas de 2 metros de alto, utilizada antes para prevenir los conflictos. “Alrededor de esta zona petrolera, viven los aborígenes de al menos 7 etnias y hay más de 100 comunidades.” Cao Minquan llama con cariño a los aborígenes “paisanos”, y dijo que “debemos suspender la producción si los paisanos protestan.”
Mauricio y Cao Minquan visitaron a varios jefes tribales, se comunicaron sinceramente con ellos, y enviaron a empleados a mantener contactos con ellos. Estos jefes tienen prestigio en sus tribus y gracias a la transmisión de información a través de ellos, los lugareños empezaron a conocer gradualmente el papel de los proyectos en la mejora de su vida. La empresa comenzó a construir escuelas y hospitales para las comunidades, y participar positivamente en las actividades de difusión cultural de los aborígenes. Incluso financió la publicación de discos de la danza indígena.
Mauricio tiene más derecho de voz sobre la sinceridad de los chinos. “Las culturas del mundo son muy diferentes. Lo que más me impresiona es la confianza y el respeto mutuo entre las personas en las empresas chinas.” Mauricio trabajó durante largo tiempo en compañías canadienses y estadounidenses. Dijo que las empresas occidentales prefieren contactar con los gobiernos al enfrentar problemas y no con los pueblos locales. Las chinas no son así. Tienen paciencia y están dispuestas a escuchar atentamente la demanda. “Gradualmente los residentes locales les abrirán su corazón. Es fácil resolver los problemas una vez establecida la confianza mutua”.
Actualmente se ha formado un entorno laboral de confianza mutua entre los empleados locales y la empresa china. En la inmensa zona petrolera, sólo trabaja un técnico chino. Los cocineros locales incluso han aprendido a preparar los panecillos cocidos a vapor y los ravioles de China. La empresa Andes es considerada por el pueblo local como la “empresa extranjera donde más se quiere trabajar”. Los empleados que han recibido la calificación de servicio de la empresa son reconocidos por todas las compañías del país.
El alambre de púas que todavía se encuentra allí recuerda a Cao Minquan que para derribar la “pared de corazón” del pueblo local, hay que mostrar su corazón sinceramente, cumplir sus compromisos, y hacer el trabajo con firmeza. Sólo así, la empresa logrará un desarrollo duradero y estable.