Un alto funcionario de la región autónoma del Tíbet, en el suroeste de China, dijo hoy martes que el "genocidio tibetano" que el Dalai Lama y su grupo secesionista sostiene que ha causado la muerte de más de un millón de tibetanos en los últimos 50 años es simplemente una mentira y una calumnia.
La población del Tíbet aumentó desde 1,2 millones de personas en 1959 a 2,87 millones el año pasado, y estas cinco décadas han constituido el período en el cual el número de habitantes de la región creció al ritmo más rápido de los últimos siglos, dijo Qiangba Puncog, presidente del gobierno regional del Tíbet.
De la población regional total, los tibetanos y personas de otras minorías étnicas representan más del 95 por ciento, mientras que el resto pertenecen a la etnia mayoritaria Han, dijo el funcionario.