China mostró hoy jueves su rechazo al último discurso del XIV Dalai Lama y subrayó que la alocución puso de manifiesto su intento de separar al país y sabotear la unidad étnica nacional, afirmó el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores Qin Gang.
Los comentarios de Qin llegan después de que el Dalai Lama criticara la política del gobierno central chino en la región autónoma del Tíbet, en el suroeste del país, y de que se refiriera a la región autónoma de etnia uygur de Xinjiang (noroeste) como "Turkestán Oriental" en el discurso que pronunció ayer con motivo del 51º aniversario de su exilio.
"Su alocución no incluye nada nuevo sino que es una repetición de los comentarios que realiza año tras año", destacó el portavoz, quien aseguró que la simpatía del Dalai lama con el "Turkestán Oriental" demuestra su intento de desmembrar la nación china.
"El Dalai Lama tergiversó la verdadera situación en el Tíbet y atacó las políticas del gobierno central en la región en un intento de dar fuerza a sus reclamaciones separatistas de independencia o semi-independencia", añadió.
Qin instó al Dalai Lama a detener sus reclamaciones y actividades independentistas para crear las condiciones adecuadas para los contactos y conversaciones con el gobierno central.
El funcionario de la cancillería también criticó los recientes intentos de algunos separatistas tibetanos de irrumpir en las embajadas chinas en la India y otros países, y señaló que esos actos dejan ver con claridad la naturaleza violenta del grupo.
"Ningún país en el mundo reconoce al 'gobierno tibetano en el exilio' ni tampoco la 'independencia del Tíbet'", añadió.
El portavoz concluyó que China agradece la decisión de algunos países de oponerse a cualquier acto que los separatistas tibetanos intenten llevar a cabo en sus territorios. Fin