En retrospectiva, los historiadores futuros probablemente evaluarán el Sueño Chino como una medida visionaria que vigorizó la transformación del presidente Xi en un amplio espectro de complejidades económicas, sociales y asuntos de gobernanza. El mundo entero debería beneficiarse –aunque pasos equivocados a lo largo del camino podrían suscitarse. La vigilancia y la diligencia no son temas opcionales.

Concluyo con una anécdota personal. Hace dos años, para honrar los éxitos de los líderes previos de China, se me pidió co-producir, dirigir y escribir una serie de documentales televisivos. Mientras este era un proyecto envidiable, sugerí que no era la mejor manera de contar la historia de China a una audiencia internacional. Mejor sería, quizás, explorar los problemas y los retos a los que se enfrentan los nuevos líderes de China.

El próximo mes, en mayo, los Retos de China será transmitido en estaciones PBS en todo Estados Unidos (por la red World). Enmarcado en los términos del Sueño Chino del presidente Xi, la serie de TV de cinco partes se enfoca en temas sociales (salud, educación, vivienda, jubilación), restructuración económica y contaminación, innovación, reforma política ( tal y como la transparencia en el presupuesto), y las creencias (mujeres, religión, servicio nacional).

Al mostrar que China es consciente de sus problemas, y que tiene seguridad de presentarlos abiertamente, esperamos profundizar la apreciación de lo que el Sueño Chino realmente significa—la transformación de China y un regalo para el mundo.