Macao, al igual que en la vecina Cantón, mantiene la costumbre del ‘Té de la mañana’. En internet ya existen explicaciones muy detalladas sobre esta exquisita costumbre culinaria. Sin embargo, hay un fenómeno muy interesante pero irremediable. En muchas familias los hijos están muy ocupados, y no tienen tiempo para atender a sus padres. En estos casos, siempre se encuentran con sus padres para el té de la mañana. Los padres llegan muy temprano al restaurante y se sientan a las puertas para esperar a sus hijos. Los hijos van y vienen, pero los ancianos siempre están ahí esperando.