El agua es también un componente importante en la elaboración de vino chino. Esto no se debe solo a que se utiliza para hidratar los granos y permite que la fermentación tenga lugar, pero también porque contribuye al aroma y la calidad del licor, dependiendo de su pH y contenido mineral. Muchas regiones productors de vino chinas son famosas no solo por sus vinos pero también por la fragancia y calidad de sus fuentes de agua.
Se pone énfasis en obtener el agua más pura directamente de arroyos o fuentes, o de la zona central de los lagos donde el agua ha sido menos expuesta a la polución. El agua utilizada en producir vinos chinos debe tener un bajo contenido de hierro y sodio, con un mayor contenido de iones de magnesio y calcio como parte de su contenido mineral total.