Jinzhou es conocido por la alta calidad de su agua, y por ello se le considera como el mejor lugar para la producción de bebidas alcohólicas. Entre las diversas especies, destaca el shaojiu (licor caliente o licor quemado) de las dinastías Ming y Qing, sobre todo la marca Guandong Shaoguo.
El 9 de junio de 1996, cuando se trasladó la vieja fábrica de producción del licor Lingchuan en Jinzhou, la gente descubrió cuatro jarrones de madera enterrados en la parte subterránea, en que se conservaban perfectamente licores deliciosos. Estos jarrones tienen una longitud de 2,62 metros, una anchura de 1,31 metros y una profundidad de 1,64 metros, y su parte interior está protegida por 1.500 capas de papel de arroz. Los arqueólogos confirmaron que estos jarrones fueron de la tienda de licor Tongshengjin y fueron sellados en el 25º año del reinado del Emperador Daoguang de la dinastía Qing, mientras que el licor conservado, además de tener una vida muy larga, tiene un sabor precioso.
Estos “licores calientes” tienen un color amarillento y contienen un 53% de volumen de alcohol. Siendo ofrendas al emperador, fueron sellados con sangre de ciervo y papeles de arroz. Tras mezclarse con la sangre de ciervo durante 150 años, estos licores han obtenido propiedades médicas.
Tras una larga labor de investigación y comprobación, el Instituto de Investigación Arqueológica de la provincia Liaoning y la Comisión de Licor de la Asociación del Arte Culinario de China consideran que estos licores, que recibieron el nombre de “Daoguang XXV” son los más largamente conservados del mundo y que su descubrimiento tiene un valor sumamente importante para la investigación sobre la cultura del alcohol de China.
Muchos expertos chinos en licor han llegado a un consenso y afirman que el “Daoguang XXV” es un tesoro de la familia de las bebidas alcohólicas, que tiene un alto valor comercial y de colección.
La institución de los récords Guinness examinó y confirmó que el “Daoguang XXV” es el licor de ofrenda con una conservación más larga entre los licores descubiertos hasta la fecha, e incluyó este récord en su libro.
El 26 de octubre de 1999, la primera subasta de comida con valor de reliquia cultural de China fue celebrada en Beijing. Mil litros del “Daoguang XXV” fueron subastados en 50 grupos y el volumen final llegó a 3,5 millones de yuanes.