Los líderes del Grupo de los 20 (G20) compuesto por las economías desarrolladas y emergentes, no deben olvidar a la población encarecida del planeta cuando se reúnan en Londres posteriormente esta semana, señaló el Presidente del Banco Mundial, Robert Zoellick, este martes.
"En Londres, Washington y París la gente discute sobre bonos o no bonos. En lugares de Africa, el sur de Asia y América Latina la pregunta es sobre comida o no comida", declaró Zoellick durante su discurso previo a la cumbre del G20 en Londres.
El Banco Mundial advirtió que, debido a la crisis financiera, habrá una brusca ralentización del crecimiento económico en los países en desarrollo durante este año, lo que pone a más personas en riesgo.
Se ha estimado que el crecimiento económico en los países en vías de desarrollo podría bajar dramáticamente hasta el 2,1 en 2009, mientras que la economía mundial se contraerá un 1,7 por ciento este año, comparada con el crecimiento de 1,9 logrado en 2008, siendo la primera desaceleración global desde la Segunda Guerra Mundial.
De hecho, el crecimiento podría descender en Europa central y del este, así como en Asia central, Latinoamérica y el Caribe.
Unos 53 millones de personas más se encontrarán en la pobreza este año, subsistiendo con menos de 1,25 dólares al día, debido a la crisis.
Zoellick aseguró que los líderes deberían aprender de las previas crisis económicas en América Latina en la década de los años 80, y de Asia en la de los años 90, con lo que no deben repetir los errores de ignorar la situación de los más vulnerables.
Los países en desarrollo necesitan ser parte de la solución global para la crisis financiera.
Como se estima que el comercio global de bienes y servicios descienda un seis por ciento este año, la caída más baja en 80 años, Zoellick pidió particularmente a los líderes del G20 a respaldar un nuevo fondo de apoyo al comercio por 50.000 millones de dólares.
El fondo combinará una inversión de 100 millones de dólares del Banco Mundial con financiamiento proveniente de los gobiernos y bancos regionales de desarrollo. Estas contribuciones públicas pueden ser endeudadas mediante un arreglo de acciones de riesgo con los principales socios del sector privado.
El director del BM dijo que muchos de los retos inmediatos de la crisis podrían resolverse si el G20 reformara y apoderara a las instituciones internacionales existentes, para ayudar a resistir el proteccionismo, evaluar la efectividad de los paquetes de estímulo y vigilar las reformas bancarias. Fin