El gobierno regional toma en plena consideración y financia el trabajo y empleo, la atención médica, la vivienda, la vejez, los seguros, el alivio de la pobreza, la ayuda a los damnificados por los desastres naturales y otros aspectos del bienestar social. Garantiza de manera total las necesidades de los ancianos viudos sin familia y los huérfanos, ha establecido varios asilos de huérfanos y casas de ancianos en las áreas agrícolas y ganaderas y ofrece garantía de alimentos, ropa, vivienda, atención médica y servios funerales a las personas que han perdido la capacidad laboral, los viudos y viudas ancianos solteros, las personas de enfermedad grave y los minusválidos sin recurso.

A la luz del requisito para el establecimiento de una economía de mercado socialista, el gobierno regional ha acelerado la reforma encaminada a crear un sistema de seguridad social centrado en el cuidado de los ancianos y el seguro de desempleo. El empeño se enfoca en la extensión del alcance del seguro de vejez y en la elevación de la proporción de los fondos sujetos a la coordinación social. Las autoridades regionales responden de unificar la planeación del seguro de vejez. El mecanismos del gobierno para los fondos del seguro de desempleo y su supervisión ha sido mejorado, al tiempo que se ha fortalecido el servicio a la recolocación de los cesantes. Al cierre de 2004, en la región había 1.373.600 trabajadores empleados, 45.500 más que un año atrás, incluyendo 316.700 en las zonas urbanas, con un aumento de 29.200; y la tasa de desempleo urbana registrada fue de 4,3%.

En 2004 los ingresos y gastos de los fondos del Tíbet para el seguro de vejez se aproximaron a los 1.000 millones de yuanes. En 2005 se esforzará por lograr que las cuotas a pagar para los fondos del seguro de vejez básico, el seguro de desempleo, el seguro médico básico y el seguro de accidente laboral alcancen 270 millones, 35 millones, 187,1 millones y 28 millones de yuanes, respectivamente, y por revisar y recuperar de las empresas nueve millones de yuanes impagados de las pólizas del seguro de vejez, con el fin de perfeccionar aún más el sistema de seguridad social.

En el Tíbet los discapacitados totalizan unos 150.000. En el periodo del IX Plan Quinquenal (1996-2000), más de 5.200 de ellos fueron rehabilitados gracias a la ayuda del Estado y al esfuerzo del gobierno regional, y a más de un millón de personas se les administró cápsulas de yodo. Actualmente, más del 70% de los distritos del Tíbet han fundado federaciones de discapacitados. En algunas aldeas hay personal encargado de ofrecer servicios especiales a los discapacitados. En 2000 el Tíbet estableció la Escuela de Educación Especial de Lhasa, la primera de su tipo para niños ciegos, sordos y mudos en la región. A ella asisten ahora 35 niños procedentes de Lhasa, Shannan y Nyingchi. En 1999 se fundó la Aldea de Niños SOS de Lhasa, China.