Vuelos directos y visados

Uno de los asuntos pendientes que necesitan una respuesta inmediata es la escasez de vuelos directos entre China y España. Hoy por hoy, sólo la compañía Air China tiene seis vuelos semanales que conectan Pekín y Madrid.

Previamente, la compañía española Air Europa había iniciado vuelos directos entre las dos capitales y, además, entre Barcelona y Shanghai, pero el servicio fue cancelado en 2006 por ser poco rentable.

La importancia de los vuelos directos es tal que el ministerio de Turismo entregó a Air China el máximo reconocimiento turístico del país, la “Placa al Mérito Turístico”, a principios de este mes de diciembre, con el compromiso por parte de la compañía de aumentar las conexiones y la frecuencia de los vuelos directos entre los dos países.

La otra medida complementaria necesaria para animar la llegada de turistas sería flexibilizar las exigencias para la obtención de un visado español por parte de los ciudadanos chinos. En este sentido, en la última visita del presidente del gobierno a Pekín, España se mostró dispuesta a facilitar la concesión de visados turísticos para impulsar la llegada de viajeros desde China.

Por último, el Plan Turismo China traerá buenas oportunidades para el número creciente aunque insuficiente todavía de jóvenes españoles que elige estudiar chino, y contribuirá a incentivar el estudio de la lengua y la cultura chinas en España.

Además, la llegada de turistas chinos permitirá acercar ambos países, lo cual podría repercutir muy positivamente no sólo en los servicios turísticos, sino también en las relaciones comerciales y, a más amplia escala, en los vínculos bilaterales en general entre España y la nueva gran potencia mundial.