Una ola de frío llegó hoy miércoles a las regiones noroccidentales de China, situación que ha causado graves problemas en el transporte, con retrasos de vuelo y atascos en las carreteras, además de cortes en el suministro de electricidad y calefacción.

En la mayor parte de la región autónoma uygur de Xinjiang, cayó una fuerte nevada desde la noche de ayer martes, lo que provocó una bajada de las temperaturas hasta los 40 grados centígrados bajo cero en el norte y este de la región.

Además, en algunas zonas de Xinjiang la nevada llegó acompañada de fuertes vientos de hasta 100 kilómetros por hora, según indicó un portavoz del departamento meteorológico regional.

"Esta es la peor ola de frío en lo que llevamos de invierno", afirmó el funcionario, quien añadió que "(el mal tiempo) se debe a las corrientes de aire gélido procedentes del oeste de la región rusa de Siberia".

En la prefectura autónoma de etnia kazaja de Ili, la nieve empezó a caer hacia las 19:00 horas del martes y no se detuvo hasta las 02:00 de esta madrugada, situación que provocó cortes de electricidad y dejó a muchos hogares sin calefacción en la ciudad de Yining, con una población de 430.000 habitantes.

Los trabajos de reparación permitieron restablecer el suministro eléctrico esta mañana, mientras los operarios siguen trabajando para volver a poner en funcionamiento el sistema de calefacción en esa ciudad.

Por otra parte, más de 200 vehículos quedaron atrapados anoche en las sinuosas carreteras de montaña en el valle del río Ili a consecuencia de una fuerte nevada de al menos 20 centímetros de profundidad, informó un policía local de tráfico.

La tormenta de nieve también obligó a cerrar el aeropuerto internacional de Urumqi (capital regional de Xinjiang), lo que provocó retrasos en 42 vuelos y dejó a más de 3.800 pasajeros en tierra, de acuerdo con fuentes del Grupo Aeroportuario de Xinjiang.

Fuentes de la oficina en Xinjiang de la Aerolínea China Southern estimaron que al menos 90 de sus vuelos programados serían cancelados o retrasados hoy.

Las autoridades del aeropuerto proporcionaron agua y alimentos gratuitos a los pasajeros afectados, mientras varios equipos de empleados seguían trabajando para retirar la nieve de las pistas. El funcionamiento habitual del aeródromo quedó restablecido a las 13:00 horas de hoy gracias a que la nevada se había debilitado.

La ola de frío también se dejó notar ayer martes en la provincia noroccidental china de Shaanxi con nevadas que trajeron una caída de los termómetros de hasta 10 grados y causaron interrupciones en el sumistro del gas.

Los conductores de taxi de Xi'an, capital provincial, tuvieron que esperar varias horas para rellenar sus depósitos a lo largo de la semana pasada.

El consumo diario de gas en la ciudad subió hasta los cinco millones de metros cúbicos, cifra que triplica el nivel normal de 1,5 millones, explicó un portavoz de la Corporación de Gas Natural Qinhua de Xi'an.

El representante de la compañía destacó que la repentina llegada de las gélidas temperaturas había hecho crecer notablemente la demanda de gas en la ciudad, por lo que su compañía estaba estudiando establecer cuotas máximas para el uso industrial y comercial con el objetivo de garantizar el suministro a los hogares.

El Centro Nacional de Meteorología advirtió que la actual ola de frío también afectará a las tres provincias nororientales chinas de Liaoning, Jilin y Heilongjiang, así como a la parte septentrional del país, incluida Beijing.

La temperatura media en esas regiones descenderá previsiblemente entre ocho y 12 grados desde hoy hasta la tarde del viernes, según la misma fuente. Fin (con fotos)