Las obras de Tan han sido traducidas a más de 20 idiomas, con la publicación de todos sus cinco libros al chino.
"Mi madre siempre dijo, 'tú no sabes nada sobre China', 'no hablas chino'," reveló Tan
Ella señaló que muchas veces se sentía avergonzada o inadecuada por no poder hablar chino, pero cuando terminó su primer libro, The Joy Luck Club, su madre se sorprendió al saber que Tan había descubierto unas verdades escondidas sobre su familia.
"Ella pensó que su difunta madre, mi abuela, me había contado las historias," Tan indicó.
La escritora señaló que aprendió de su madre, quien solía hablar de su pasado en China, el modo de contar una historia.
"Ella lo contaría como si hubiésemos vuelto a aquel tiempo, y estuviésemos viendo suceder las cosas," reveló Tan ". Mi madre me enseñó a usar la imaginación, escoger los detalles y hacer la historia más colorista.