Supervivencia del estilo chino de los acupuntores

Cheng Kai se graduó de la universidad de acupuntura en 1995. En ese periodo, se enfrentaba una sociedad que acababa de pasar de la economía planificada a la del mercado y en todos lugares se hablaba de la ‘mercantilización’. En ese periodo, el conocimiento y la demanda social de la medicina tradicional china no estaban tan en boga como lo ha llegado a estar 15 años después.

• Editor： Sonia
• 16:31:07 2011-03-18 / spanish.china.org.cn

“Estudiaba en la Universidad de Medicina Tradicional China de Nanjing. Sólo me dedicaba a la acupuntura y los resultados de otras asignaturas no eran buenos. Pero no me importaba. En el tercer año me fui para atender a enfermos en clínicas de Shanghai”, relata Song.

Song Weilun no tiene mucho gusto por lo moderno y no le gustan las computadoras. Dedica su tiempo libre a conocer a personas peculiares. Apredió taichi con el monje taoísta del Insituto Taoísta de China, los puntos acupunturales del viejo médico Dong Qichang en Taiwán, y las terapias de acupuntura en el vientre, de acupuntura con medicina líquida y de sangramiento con distintos maestros.

Cuando estaba en el tercer año de la universidad, Lin Ruguang, uno de los diez millonarios de Indonesia y dedicado al negocio de vidrio, vino a Nanjing para los negocios. No durmió durante 4 días y 3 noches, por eso padeció un grave edema en las piernas. Justamente en ese momento, Song Weilun estaba haciendo acupuntura a un profesor que sufría la enfermedad de Párkinson, aliviándole el edema de piernas. Después de enterarse de ello, Lin Ruguang encontró a Song Weilun. Con el tratamiento de acupuntura, Lin Ruguang pudo dormir y se recuperó del edema en las piernas.

Con la recomendación de Lin Ruguang, Song Weilun, todavía en el tercer año de universidad, tomaba frecuentemente los aviones privados de los millonarios con destino a Bangkok, Singapur o Indonesia para atender a los chinos ricos resdientes allí.

Después de graduarse, abrió su propia clínica en un barrio residencial de la calle Hongmei de Shanghai en el año 2004, con una superficie de 145 metros cuadrados. No obstante, su apariencia de joven no coincide con la imagen tradicional de un veterano médico de medicina tradicional. Al principio tuvo una vida difícil, pero gracias al buen resultudo de sus tratamientos, su clientela ya no se limitaba a los extranjeros que acudían a su clínica.

Song Weilun también estableció un centro de rehabilitación para la apoplejía en Indonesia. Los miembros del equipo son principalmente graduados de las universidades de medicina tradicional china.

Otro de los socios inversores del centro es un paciente suyo, quien es también un comerciante inmobiliario del país. Tiene su propio hospital. Song Weilun curó su apoplejía con acupuntura, y luego éste introdujo a Song en Indonesia y lo presentó a distintas personalidades famosas.

Song Weilun cree que para los norteamericanos y europeos, la medicina tradicional china estña todavía rodeada de misterio. Su ventaja es que puede interpretar claramente la teoría en el idioma del paciente, por lo que su labor consiste también en divulgar la acupuntura y la medicina tradicional china.