A principios de este mes, la empresa YGE (por sus siglas en inglés) envió un grupo de más de 30 técnicos a Sudáfrica para instalar una zona de exhibición de su marca en torno del estadio del Mundial, así que aparece por primera vez un patrocinador chino en la historia del Mundial. El día 9 el vicepresidente de la empresa, Liu Yaocheng, expresó en Sudáfrica con emoción incontenible: “Ya estamos listos para mostrar nuestro glamour ante el mundo.”

Fue por una iniciativa no premeditada que YGE se convirtió en un patrocinador global del Mundial. En realidad empezó a “jugar al fútbol” ya en 2006.

YGE se puso a marchar sobre el mercado de energía solar en 2004, con Europa como su meta de desarrollo principal, donde Alemania, sobre todo, era un importante mercado de productos fotovoltaicos. Mientras dio la coincidencia de que la Copa Mundial iba a celebrarse en Alemania en 2006, YGE anhelaba hacer brillar su marca a través de ventas en ese evento deportivo. Pero debido a que todavía era una empresa incipiente, no consiguió ser patrocinador, sino sólo pudo proporcionar una partida de componentes fotovoltaicos de un megavatio al estadio de la ciudad de Kaiserslautern, dedicados a alimentar con energía sus computadoras. Liu dijo que el efecto del patrocinio fue maravilloso. Además de ensanchar la visión a los admiradores extranjeros del fútbol, los paneles solares colocados en lo alto del estadio les permitieron conocer una empresa china llamada YGE.

Lo más sorprendente fue la conversión de YGE en patrocinador de Osasuna, uno de los equipos de la Liga de Primera División de España, en 2007. Hasta hoy día, el nombre de la empresa en chino “中国•英利” sigue impreso en el logo de la ropa de sus jugadores.

En realidad, ni en uno y el otro caso YGE se imaginaba patrocinar la Copa Mundial que se celebraría cuatro años más tarde, sino aprovechar la oportunidad para ampliar su popularidad. “Existe una diferencia injusta de precios entre los productos chinos y extranjeros. Incluso si un producto chino es completamente igual que otro hecho en Alemania en funcionamiento y calidad, éste es 10-15% más caro que el nuestro”, se quejó Liu, quien agregó que ellos estaban por poner al público en mejor conocimiento de su marca, pero que sin habérselo propuesto ingresaron en las canchas del Mundial.

La Copa Mundial, que se renueva cada cuatro años, es un evento global que los admiradores de todos los países siguen con mucha atención. Así, a YGE le parece que es una óptima oportunidad. Indudablemente, el fútbol es el deporte más popular del mundo, que está enraizado en los pueblos. Como es el mayor evento deportivo del planeta y tiene amplias y profundas influencias globales, el Mundial ofrece una plataforma de promoción de marcas y marketing a las empresas de talla internacional. Seguramente, YGE podría elevar su popularidad si fuese uno de sus patrocinadores. Por eso, Liu empleó cuatro meses enteros haciendo investigaciones en África. No fue antes de una serie de evaluaciones que se lanzó oficialmente el programa de patrocinio.

Como primer paso, por medio del Fondo de Desarrollo Chino-Africano, según sepamos, YGE tuvo contacto con la FIFA, que justamente estaba buscando patrocinadores para el Mundial. En noviembre del año pasado YGE empezó a negociar con ella sobre los detalles de la colaboración y, después, a mediados de diciembre, funcionarios de la FIFA estuvieron de investigación en YGE. Al comentar de la unión de su empresa con la FIFA, Liu señaló: “Compartimos la misma misión y concepción del valor con la FIFA”. Y añadió: “La misión histórica de la FIFA consiste en mejorar el medio ambiente del mundo y crearle un futuro espléndido. Y nuestra empresa, a su vez, se dedica a corregir el estado de agotamiento de la energía en el mundo a través del desarrollo de la tecnología fotovoltaica y del ofrecimiento de una energía renovable limpia y competitiva en precios.” Precisamente es por su “elemento chino” y “energía renovable verde” que YGE fue escogido por la FIFA.