D’Zhana Simmons manifestó que se sintió como una “persona falsa” durante los 118 días que no tenía un corazón latiendo en su pecho. “Pero sabía que estaba aquí de verdad,” comentó la adolescente de 14 años, “y viví sin un corazón.”

Mientras recibía el alta de un hospital de Miami el miércoles, la adolescente parecía estar asombrada por lo que había aguantado. Desde julio, ella ha tenido dos transplantes de corazón y sobrevivido con latidos de corazón artificiales – sin corazón – durante los cuatro meses entre los transplantes.

D’Zhana Simmons (izq), 14, de Carolina del Sur, quien sobrevivió sin un corazón durante cuatro meses, se sienta con sus doctores, incluyendo al Dr. Si Pham (centro) y el Dr. Marco Ricci (dcha) en una rueda de prensa en el Centro Médico de la Universidad de Miami / Jackson Memorial, Miami, 19 de noviembre del 2008. Simmons fue mantenida viva con un aparato artificial que bombeaba sangre hasta que tuvo un transplante de corazón. [Agencias]

La primavera del año pasado, D’Zhana y sus padres supieron que ella tenía un corazón hipertrofiado demasiado débil para bombear sangre. Ellos viajaron desde su casa en Clinton, Carolina del Sur, hasta el Hospital Infantil Holtz en Miami para un transplante de corazón.

No obstante, su nuevo corazón no funcionó correctamente y corría el peligro de romperse, por lo que los cirujanos lo removieron dos días más tarde.

E hicieron algo inusual, especialmente para una paciente joven. Ellos sustituyeron al corazón por unos aparatos de bombeo artificial que mantuvo a la sangre fluyendo por su cuerpo hasta que pudiese realizar un segundo transplante.

El Doctor Peter Wearden, un cirujano cardiotorácico del Hospital Infantil de Pittsburg, quien trabaja con el tipo de bombeo usado en este caso, señaló que lo que el equipo médico de Miami logró hacer es “asombroso.”

“Durante más de 100 días, ¿no había corazón en el cuerpo de la chica? Eso es bastante asombroso.” Manifestó Wearden.

Las bombas, aparatos que asisten a los ventrículos, suelen ser usados con un corazón para ayudar a las cámaras a circular sangre. Con el corazón de D’Zhana removido, los doctores en el Hospital Infantil Holtz fabricaron cámaras de corazón con tejido y las conectaron a las dos bombas.

Cuando D’Zhana se encontró en una situación estable para otra operación, los doctores realizaron el segundo transplante en el 29 de octubre.

“Verdaderamente creo que es un milagro,” declaró su madre, Twolla Anderson.

Actualmente, D’Zhana indicó estar agradecida por pequeñas cosas: Pronto verá a sus cinco hermanos, y podrá pasar tiempo en el exterior.