La costumbre de "Shousui", o velar la Nochevieja, se remota a una leyenda folklórica: una bestia extraña llamada "Nian" suele rondar a la humanidad en la Nochevieja. La gente debe velar para evitar que les sorprenda su llegada. Las explosiones de petardos pueden ayudar a expulsar a la bestia. Hace varios años, a consecuencia de la contaminación ocasionada por los fuegos artificiales, se les prohibió en ciudades medianas y grandes, pero dicha orden generó amplia insatisfacción. Por lo tanto, desde el año pasado el gobierno decidió abolir la "orden de prohibición", cambiándola por la de "explosiones limitadas".
En la madrugada del Año Nuevo, toda la familia se levanta temprano y viste ropas nuevas. Los jóvenes felicitan primero a los mayores de la familia y luego salen a visitar las casas de parientes y amigos. Los de la generación mayor por lo general se quedan en casa esperando la llegada de los jóvenes.