Las Naciones Unidas urgieron a los países a garantizar el acceso universal a servicios de energía modernos y a reducir la intensidad energética global en un 40 por ciento para 2030, según un informe publicado hoy.
"Las decisiones que tomemos hoy en relación a la energía tendrán un impacto profundo sobre el cambio climático, el desarrollo sustentable, el crecimiento económico y la seguridad global", dijo el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, a reporteros durante la presentación de un informe hecho por su Grupo de Asesores sobre Energía y Cambio Climático.
"Necesitamos una revolución de energía limpia en los países en vías de desarrollo, donde la demanda está aumentando rápidamente, y en el mundo desarrollado para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero", dijo.
Garantizar el acceso universal a energía moderna y conseguir una reducción en la intensidad energética son dos objetivos que trabajan juntos, dijo Ban.
El informe argumenta que una mayor eficacia energética permite que la infraestructuras existentes y nuevas lleguen a más personas por medio de la liberación de recursos capitales para invertir a favor de un acceso mejorado a los servicios de energía moderna.
La Agencia Internacional de Energía calcula que el creciente acceso a la electricidad en todo el mundo resultará en un aumento del 1,3 por ciento en las emisiones de gases de efecto invernadero. Sin embargo, estas emisiones podrían reducirse aún más por medio de una mayor eficiencia energética y el uso de fuentes claras y renovables de energía.
Alrededor de 1.600 millones de personas no cuentan con acceso a la electricidad. Un abastecimiento de energía confiable y costeable es la clave para el crecimiento económico y la consecución de los objetivo contra la pobreza contenidos en los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), dijo el informe.
El informe urge a las naciones a desarrollar objetivos nacionales agresivos para conseguir acceso universal así como a establecer planes y adecuar los ambientes para proveerlos.
Mientras tanto, la comunidad internacional necesita armonizar los estándares técnicos para los principles productos que consumen energía y equipo, para acelerar la transferencia de conocimiento para saber operar y tener buenas prácticas, así como catalizar un mayor flujo de capital privado a las inversiones a favor de la eficiencia energética.
Aproximadamente el 60 por ciento de los gases de efecto invernadero, que se cree contribuyen al cambio climático, provienen de la producción, entrega y uso de energía dijo el reporte. Fin