El primer ministro de Canadá, Stephen Harper, partió de aquí esta mañana para una visita de dos días a Haití para evaluar la situación humanitaria en el lugar y discutir el proceso de reconstruir el país azotado por el sismo.

"Los canadienses abrieron rápida y generosamente sus corazones y sus carteras luego del devastador sismo", dijo el primer ministro en un conunicado emitido antes de su partida.

"Estamos continuando el trabajo con el gobierno de Haití para entregar ayuda humanitaria urgente", señaló, y enfatizó la necesidad de enfrentar los desafíos a largo plazo de reconstrucción con base en los principios de sustentabilidad, efectividad y responsabilidad.

Harper discutirá con el presidente de Haití, René Preval, y el primer ministro Jean-Max Bellerive, sobre los desafíos de los esfuerzos de socorro y las prioridades de reconstrucción de Haití.

También se reunirá con varios canadienses quienes están llevando ayuda humanitaria en el lugar.

El papel del liderazgo de Canadá en Haití refleja las profundas relaciones de largo plazo entre ambos países. Apróximadamente 100.000 canadienses tienen raíces en Haití y una gran cantidad de familias canadienses han sido afectadas personalmente por el desastre de enero.

El 12 de enero, un sismo de 7,0 grados en la escala de Richter sacudió a Haití, cerca de la capital de Puerto Príncipe. El sismo mató apróximadamente a 200.000 personas y dejó más de 300.000 personas lesionadas. La mayor infraestructura fue destruida y la electricidad y las comunicaciones fueron interrumpidos gravemente. Fin