El presidente de Honduras, Porfirio Lobo Sosa, se comprometió hoy a sanar las heridas dejadas por el golpe de Estado y a dar cumplimiento al acuerdo Tegucigalpa-San José para la reconciliación total en Honduras. "Hoy queremos sanar las heridas del pasado, hoy queremos convertimos en una nación que tomalas mejores experiencias y las une a ideas nuevas, frescas, acordes con los tiempos modernos en los que se encuentra el mundo", dijo. En su discurso, Lobo Sosa también destacó que Honduras acaba de salir de una de sus peores crisis política de la historia, "pero hemos logrado evitar todos los grandes peligros que afrontaba nuestra nación". La familia hondureña empieza a reconciliarse, el país marcha por la ruta del entendimiento en busca de la unidad nacional, agregó. Para el mandatario, "hemos superadolos desacuerdos, dejamos el pasado atrásy sólo vemos hacia adelante, haciaun horizonte brillante y prometedor". Lobo Soda agradeció a los presidentes de Costa Rica, Oscar Arias, al de República Dominicana, Leonel Fernández, y de Panamá, Ricardo Martinelli, por su interés en solventar la crisis política. El presidente hondureño urgió la reincorporación de Honduras a la Organización de Estados Americanos (OEA), de la cual este país fue suspendido tras el golpe de Estado, y agradeció al organismo su colaboración para superar la crisis. Lobo Sosa prometió en su discurso respetar su período de gobierno de cuatro años y no quedarse ni un día más. "Entregaré puntualmente a mi sucesor, guardando respeto absoluto a las leyes, según lo he jurado ante nuestra sagrada constitución y ante ustedes", dijo. El mandatario hondureño consideró que "hoy empieza uncambio de actitud, un cambio en la forma en que todos vemos a honduras, un cambio ya". Fin