Las autoridades de Salud de República Dominicana y de Haití están preocupadas de que en la isla la Hispaniola, afectada por el terremoto de 7.3 grados, se desaten brotes de diversas enfermedades cuando llegue la época de lluvias en esa región del Caribe.
Es por eso que todas las personas que entran o salen de la devastada nación haitiana es vacunada por personal médico dominicano que opera en las ciudades fronterizas de Jimani, Pedernales, Elías Piña y Dajabón.
Las autoridades dominicanas no dan cifras de la cantidad de dosis aplicadas a periodistas, socorristas, soldados y delegaciones de organismos internacionales que cruzan del lado Este hacia Puerto Príncipe por la vía terrestre, pero en los puestos fronterizos las filas para recibir las vacunas son interminables.
Desde Puerto Príncipe se informó que los hospitales continúan repletos de enfermos, una situación que favorece a la expansión de enfermedades dentro de la población de la isla la Hispaniola. Igual situación se registra en los centros de salud dominicanos, sobre todo lo que operan en la línea fronteriza.
"Ahora lo que necesitamos son hospitales de campaña para ocuparnos de los postoperatorios y poder liberar así los hospitales, los cuales tienen que retornar a su actividad habitual", indicó que a medios de comunicación locales Alex Larsen, ministro de Salud de Haití
Dentro de pocos meses en esta región del mundo comienza la temporada de huracanes y tormentas tropicales, las cuales dejan fuertes lluvias, ocasionando las crecidas de los ríos y los arroyos.
Esa situación favorecería los brotes de enfermedades en la isla caribeña, habitada por 20 millones de personas, entre dominicanos y haitianos. Fin