Hasta ahora, las Naciones Unidas han brindado ayuda alimentaria a 60.000 personas en la capital de Haití, lugar que fue azotado por un catastrófico terremoto la semana pasada. Se espera que el secretario general de la ONU Ban Ki Moon, llegue a Puerto Príncipe, capital de Haití, la tarde de hoy domingo.
Dentro de las 24 horas posteriores a los sismos del 12 de enero, el Programa Mundial de Alimentos de la ONU (PMA) inició a distribuir comida y en última instancia pretende alcanzar a dos millones de personas dentro de su programa de emergencia.
Para la noche del sábado ya había alimentado, con comidas listas para comerse, al menos a 60.000 personas afectadas por el sismo de 7,3 grados de magnitud, el cual se cree que afectó a una tercera parte de los nueve millones de habitantes de Haití.
Debido a los problemas de seguridad y logísticos para transportar y entregar la comida en la capital, el lugar más afectado por los sismos, el PMA sobrevoló Puerto Príncipe el viernes y sábado, y realizó inspecciones en el terreno para determinar lugares probables para distribuir comida, operaciones que requieren escoltas de la Misión de Estabilización de la ONU en Haití (MINUSTAH). "Estamos movilizando todos los recursos disponibles para dar la asistencia alimentaria que se necesita con urgencia como parte de un esfuerzo de recuperación coordinado y rápido", dijo el director ejecutivo del PMA Josette Sheeran.
La ONU y sus socios iniciaron una petición el viernes para recaudar 562 millones de dólares para ayudar a las víctimas del terremoto, el cual dejó a los servicios básicos en Puerto Príncipe al borde del colapso.
La ONU estima que 10 por ciento de los edificios de la ciudad fueron destruidos, dejando a 300.000 personas sin casas y a muchas más huyendo de la destrucción.
Los fondos pretenden ayudar a un estimado de 3 millones de personas afectadas por un período de seis meses, con la mitad de los fondos destinados para brindar ayuda alimentaria de emergencia y el resto para servicios de salud, agua, saneamiento, nutrición, recuperación temprana y educación de emergencia, así como para otras necesidades clave. Fin